jueves, 1 de enero de 2015
CERES: Un protoplaneta que podría albergar vida extraterrestre
Una noticia dada a conocer el último fin de semana por Discovery News indica que la sonda espacial Dawn de la NASA dentro de poco empezará a despejar las dudas sobre el protoplaneta Ceres - el mayor objeto en el cinturón principal de asteroides entre Marte y Júpiter - que posiblemente sea capaz de acoger vida tal como la conocemos. En efecto, Ceres es, y "no crea que sea menos interesante en términos de la astrobiología que otros mundos potencialmente habitables", dijo Jian-Yang Li, del Instituto de Ciencia Planetaria en Tucson, EE.UU., citado por 'Discovery News'. Se cree que Ceres tiene una gran cantidad de agua debido a su baja densidad global. De hecho, el líquido vital parece representar alrededor del 40% del volumen de protoplaneta, según los investigadores. Como sabéis, la sonda Dawn (amanecer en inglés) entrará en su órbita el próximo 6 de marzo y deberá esclarecer las condiciones potenciales de vida. Dawn trazará un mapa detallado de la superficie y se encargará de recoger una gran cantidad de información acerca de la geología del cuerpo y las condiciones térmicas. La llegada de la nave espacial a Ceres marcará la primera vez que una nave espacial ha llegado a estar en órbita de dos objetivos del Sistema Solar. Previamente, la nave exploró el protoplaneta Vesta durante 14 meses, desde 2011 hasta 2012, capturando imágenes detalladas y datos acerca de ese cuerpo.«Ceres es casi un completo misterio para nosotros», dice Christopher Russell, investigador principal de la misión Dawn, en la Universidad de California, Los Angeles. «Ceres, a diferencia de Vesta, no tiene meteoritos vinculados que ayuden a revelar sus secretos. Todo lo que podemos predecir con confianza es que vamos a quedar sorprendidos».Ambos cuerpos planetarios tienen su importancia. Ceres podría haberse formado más tarde que Vesta, y con un interior más frío. La evidencia actual sugiere que Vesta sólo conserva una pequeña cantidad de agua porque se formó antes, cuando el material radiactivo era más abundante, lo que habría producido más calor. Ceres, por el contrario, tiene un manto de hielo de espesor y puede incluso tener un océano debajo de su corteza helada. Ceres, con un diámetro medio de 950 kilómetros, es también el cuerpo más grande del cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter. En comparación, Vesta tiene un diámetro medio de 525 kilómetros, y es el segundo cuerpo más masivo del cinturón, informa la NASA. Dawn ya ha completado cinco años de tiempo acumulado de empuje, mucho más que cualquier otra nave espacial. «Orbitar tanto Vesta como Ceres sería verdaderamente imposible con propulsión convencional. Gracias a la propulsión iónica, estamos a punto de hacer historia, con la primera nave espacial en orbitar dos mundos inexplorados», afirma Marc Rayman, ingeniero jefe de Dawn y director de la misión, en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA.