jueves, 4 de julio de 2019

MISTERIOS DE LA BIBLIA: Los Ángeles Caídos

Según las Sagradas Escrituras, los Ángeles Caídos o Nefilim son todos aquellos ángeles expulsados del cielo como castigo por desobedecer o rebelarse contra Dios. Las Sagradas Escrituras nos dicen también que un ángel caído tendrá que vagar por la Tierra hasta el día del juicio final cuando serán desterrados y enviados al infierno. El ángel caído más conocido y quien lidero la rebelión fue Lucifer, el cual era muy bien considerado - de ahí que su nombre significara “Portador de la luz” - pero según la Biblia, convertido en serpiente tentó a Adán y Eva a desobedecer los mandatos divinos para poder convertirse en dioses, motivo por el cual mordieron la manzana y fueron castigados. En cuanto a Lucifer, aunque en principio podía visitar a Dios en el cielo, no abandonó su actitud soberbia y arrogante hasta que al final fue definitivamente expulsado junto a otros doscientos ángeles rebeldes, condenados a vagar por la Tierra hasta que llegue el día del Juicio Final: “Entonces se entabló una batalla en el cielo: Miguel y sus Ángeles combatieron con el Dragón. También el dragón y sus ángeles combatieron pero no prevalecieron y no hubo ya en cielo lugar para ellos. Y fue arrojado el gran Dragón, la serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el seductor del mundo entero” Apocalipsis 12,7-9. Existen tres motivos principales que nos explican por qué se rebelaron algunos ángeles: libre albedrío, lujuria y vanidad. Cuando Dios creó a los ángeles, los dotó de entendimiento y libertad; pero algunos ángeles comenzaron a cuestionar y alejarse de Dios, conforme se iban alejando se iban formando las jerarquías angelicales, algunos se alejaron totalmente y convertidos en humanos, fueron los gigantes que poblaron la Tierra; Los ángeles que cayeron por lujuria, entre los que destacan Semyazza, Samael y Azael, son mencionados en escrituras apócrifas como El libro de Enoc donde se dice que Dios le pidió a los Grigori (un grupo selecto de 200 ángeles) para ayudar a los arcángeles en la creación del Edén, pero cuando los Grigori bajaron a la Tierra conocieron a las hijas de los hombres de quienes se enamoraron y con las que se casaron. Esto provocó la furia de Dios que los desterró del cielo convirtiéndolos en demonios. El Libro de Enoc menciona un total de 200 ángeles caídos, de los cuales sólo aparecen los más importantes, entre nombres de los ángeles caídos: Samyaza, su líder; Urakabarameel, Akibeel, Tamiel, Ramuel, Danel, Azkeel, Saraknyal, Asael, Armers, Batraal, Anane, Zavebe, Samsaveel, Ertael, Turel, Yomyael y Azazyel o Azazel; Pero el motivo más grave que llevó a rebelarse a otros ángeles fue el orgullo o vanidad (considerado dentro de los siete pecados capitales). Según las Sagradas Escrituras, Dios creo a Luzbel, a quien dotó de una gran inteligencia, perfección y hermosura para que organizara al resto de los ángeles; de esta manera Luzbel (también llamado Lucifer) llegó a ser tan poderoso, que la vanidad se apoderó de él y lo hizo sentirse superior a Dios, lo que lo llevó a competir en su contra. Por esta razón Dios lo desterró del paraíso y junto con él una tercera parte de la corte celestial que se le había unido. Llamado desde entonces Satanás (que significa adversario) es el Diablo que todos conocemos y que según el Apocalipsis, será lanzado en el gran lago de fuego y azufre, donde están la bestia y el falso profeta junto a los ángeles caídos; y serán atormentados día y noche por siempre jamás.