jueves, 20 de octubre de 2022
ESCENARIO COMPLICADO: El hallazgo de vida extraterrestre podría desatar una guerra devastadora en el planeta
El descubrimiento de civilizaciones alienigenas podría tener efectos desastrosos en la Tierra, como resultado de un conflicto geopolítico entre los países que busquen monopolizar el hallazgo para sí, en lugar de una guerra interestelar, según advierten varios expertos que se oponen a establecer contacto alguno “con formas de vida desconocidas, de quienes ignoraríamos cuales serian sus verdaderas intenciones para con nosotros”, de lo cual da cuenta esta semana The Sun. Ante todo, cabe precisar que el universo observable - que es el área del universo desde la cual la luz ha tenido tiempo de llegar a nuestro sistema solar- tiene aproximadamente 93 mil millones de años luz de diámetro, con alrededor de 100 mil millones de estrellas solo en nuestra galaxia, la Vía Láctea. Los científicos de SETI esperan que este número absoluto sea estadísticamente probable que la vida inteligente como la nuestra haya evolucionado en al menos algunos otros planetas dentro del rango comunicable de la Tierra. “Hay miles de millones de estrellas en nuestra propia galaxia, la Vía Láctea, y la gran mayoría están orbitadas por planetas. Y hay miles de millones de galaxias en el universo. Es absurdo desde todo punto de vista que la Tierra fuera el único planeta en todo el cosmos que albergue vida. Así que es casi seguro que la está exista ahí fuera", afirmó por su parte Douglas Vakoch, presidente de METI International. Al respecto, tanto la SETI (Search for Extra-terrestrial Intelligence) como la METI (Messaging Extra-terrestrial Intelligence) son organizaciones dedicadas a encontrar y comunicarse, respectivamente, con potencial vida extraterrestre en el universo. Pero no a todo el mundo le encanta la idea de que enviemos nuestra ubicación a las estrellas para que alguien o algo nos localiza. Los temores planteados por muchos científicos incluyen no solo los peligros de que una civilización alienígena más avanzada detecte nuestras señales e intente invadir y destruir el planeta, sino también que un solo país detecte una respuesta de extraterrestres y use esa información para su propio beneficio, Como sabéis, desde hace tiempo, ha habido mucha discusión entre los científicos sobre los peligros de enviar señales al espacio y aguardar las respuestas, debido a la preocupación de que cualquier contacto con extraterrestres sería inevitablemente una mala noticia para la humanidad ya que podría resultar que los humanos peleen para apoderarse de esos conocimientos, sin percatarse de los peligros que ello acarrea. Precisamente, Stephen Hawking expresó bien este temor en el 2010 cuando dijo: "Esos seres avanzados que capten nuestras señales podrían ser nómadas, que busquen conquistar y colonizar cualquier planeta que pudieran alcanzar y al localizarnos, podríamos convertirnos en su presa. Al poseer tecnología infinitamente superior a la nuestra, podrían fácilmente exterminamos como nosotros hicimos con los nativos americanos en el siglo XVI" expresó en reiteradas oportunidades. Sin embargo, según un reciente artículo publicado en la revista Space Policy - que es una crítica de un estudio anterior dado a conocer por ellos mismos en el 2020 sobre los peligros geopolíticos de detectar vida extraterrestre - estos temores “son infundados”. "En su artículo para Space Policy, Jason T. Wright de la Universidad de Penn State, critica la afirmación que hicieron Kenneth Wisian y John Traphagan (del Centro de Investigación Espacial de la Universidad de Texas) en el 2020 en la misma publicación que sugería que había un riesgo medible de conflicto inducido por una parte que simplemente detectaba una señal alienígena, y luego trataría de mantener el acceso exclusivo a esa señal", dijo John Rummel, ex científico del programa SETI y astrobiólogo senior de la NASA . Para Wisian y Traphagan, el peligro radica en lo que podamos hacernos a nosotros mismos. “Es probable que cualquier civilización alienígena tenga una enorme ventaja tecnológica sobre nosotros y, siempre que no sea maliciosa, esa presenta una oportunidad para las naciones. Si un gobierno monopoliza las comunicaciones con esos seres avanzados, podría obtener una ventaja tecnológica. Imagínese a China, Rusia o EE. UU. obtenerlos. O peor aún, a Corea del Norte, Irán, etc. Podría conducir a un conflicto u otras consecuencias indeseables” anotaron. Sin embargo, Wright critica semejante escenario y sostiene que el contacto que puede parecer trivial para una inteligencia extraterrestre bien podría contener información técnica valiosa para una nación monopolizadora, siempre y cuando sepa interpretarla. "Que esto pueda suceder no es nada obvio. En primer lugar, la ciencia es acumulativa y no lineal: para que una nueva perspectiva sea útil, primero debemos tener el contexto científico adecuado para comprenderla", escribe. ¿Podrían los eruditos medievales hacer uso de un libro de texto sobre diseño de armas nucleares? Si pudieran entenderlo, ¿podrían actuar en consecuencia? No es probable, según el autor, “lo mismo puede ocurrir con la información tecnológica avanzada proporcionada por los alienígenas sino pudieran darle alguna utilidad. Además, ¿qué ventaja tecnológica específica podría obtenerse? Ya tenemos suficientes armas nucleares para destruir la civilización. También tenemos armas biológicas. ¿Podrían los alienígenas querer compartir involuntariamente información valiosa que podría permitir al país monopolizador construir algún tipo de superarma? de seguro no”. Según Wright, estaríamos adentrando en el terreno de la ciencia ficción. Para el autor, la mejor manera de evitar que quienes piensen que pueden obtener un monopolio es a través de la apertura en lugar de medidas más estrictas de seguridad y vigilancia estatal. De hecho, las medidas urgidas en el artículo del 2020 podrían precipitar precisamente lo que están tratando de evitar. ¿Qué sugiere entonces que debería hacer el mundo si logramos ponernos en contacto con una civilización extraterrestre? El autor recomienda “transparencia e intercambio de datos entre todos los países", algo que en las actuales circunstancias - con EE.UU. y la OTAN promoviendo la guerra en el mundo demonizando a Rusia y China - parece francamente imposible, por lo que la advertencia dada en el 2020 podría convertirse en una siniestra posibilidad.