TIEMPOS DEL MUNDO

jueves, 30 de junio de 2022

LOS EXTRATERRESTRES PODRÍAN ESTAR VIGILANDONOS: ¿Cuáles serán sus intenciones?

Son muchos los que están esperando el día en que la NASA o cualquier otra agencia espacial confirme que han finalmente han descubierto vida extraterrestres inteligente en otros planetas e incluso aquí en la Tierra. Durante mucho tiempo nos hemos estado preparando mentalmente para encontrarnos con nuestros homólogos alienígenas, a quienes durante mucho tiempo hemos imaginado como seres celestiales que tal vez puedan enseñarnos sobre quiénes somos, de dónde venimos y hacia donde nos dirigimos. Hasta ahora los astrónomos han buscado en un radio de hasta 30 mil millones de años luz de nuestro planeta y no han encontrado absolutamente nada, o por lo menos eso es lo que nos dicen. Sin embargo, cada vez son más los altos cargos gubernamentales que están convencidos de que existe vida extraterrestre inteligente. El último en pronunciarse ha sido el jefe de la agencia espacial rusa. En efecto, en una entrevista a Dmitry Olegovich Rogozin, difundida por el canal de televisión Rossiya 24, el actual director general de la Corporación Espacial Estatal rusa, Roscosmos, declaró creer en la existencia de vida extraterrestre, que podría ser más inteligente y tecnológicamente avanzada que la humanidad. "Nuestras tecnologías y nuestra comprensión de la ciencia podrían ser insuficientes para tomar conciencia de ello" añadió. Según Rogozin, miles de factores podrían haber contribuido al surgimiento de vida en cualquier parte del universo, y que la capacidad de la humanidad para estudiar el espacio sigue siendo limitado. “Conocemos la teoría del ‘Big Bang’, pero ¿y si este ‘Big Bang’ tuviera lugar solo dentro de cierta parte del universo que es visible para nosotros?”, preguntó el jefe de Roscosmos, mientras agregó que podría haber otros mundos así como innumerables factores que podrían contribuir al surgimiento de la vida, incluida una inteligente” aseveró. Los rusos se suman así al cambio de paradigma respecto a los UAP (Fenómenos Aéreos no Identificados) que encabeza EE.UU. primero, reconociendo la existencia de fenómenos aéreos que superan su capacidad tecnológica y militar; segundo, nombrando un grupo de trabajo oficial; tercero, llevando sus conclusiones preliminares al Congreso, tanto a la comisión de secretos como en audiencia pública; y, finalmente, dotando de presupuesto - aunque exiguo - a la NASA para incursionar científicamente en el asunto. La de Rogozin no es una opinión cualquiera. Nombrado en el 2018 director general de Roscosmos, estuvo vinculado con anterioridad a la industria de defensa siete años como viceprimer ministro del país y, aún antes, entre 2008 y 2011, fue embajador ruso ante la OTAN, por lo que sabe de lo que habla. En la entrevista difundida en Rossiya 24, añadió que "los extraterrestres también pueden estar estudiando las civilizaciones de la Tierra mientras pasan desapercibidos". Antes de que la NASA anunciara la creación de un equipo de trabajo para estudiar los fenómenos aéreos no identificados, era una práctica común entre los científicos ridiculizar el estudio científico de los OVNIS. Pero el zeitgeist ha cambiado, el espíritu de la época, la referencia al ambiente intelectual y cultural de nuestra era ha mudado del "no" más absoluto al "puede ser" o el "porqué no" sin una prueba determinante que respalde ese cambio de paradigma. Rogozin reconoció que la Academia Rusa de Ciencias había estado realizando estudios y "recolectando pruebas" relacionadas con la vida extraterrestre y los OVNIS en particular y agregó, que "el 99,9% de todos los casos revisados por los especialistas rusos resultaron ser 'atmosféricos y otros fenómenos físicos' que no tienen nada que ver con ninguna hipótesis de vida inteligente extraterrestre", aunque añadió que asumen que algunos avistamientos de OVNIS "reales" podrían haber tenido lugar. Es más, Rogozin dijo que él personalmente revisó en la década de los setenta, algunos informes de veteranos pilotos de pruebas soviéticos que informaron fenómenos inexplicables que presenciaron mientras probaban nuevos aviones por primera vez. El director general de la agencia Roscosmos confesó haber contactado previamente con la NASA y recibió información similar de sus homónimos estadounidenses. Se constata entonces que, como durante la Guerra Fría, el ambiente de colaboración entre "adversarios" sigue vigente ya que el fenómeno OVNI es universal. Más inquietante aún fue la afirmación de que los seres humanos podríamos ser objeto de alguna observación externa. "Podemos estudiar bacterias –dijo–, pero también podemos ser estudiados como bacterias". En su opinión, "podría haber formas de vida que hayan avanzado a un nivel tecnológico que les permita estudiar la civilización humana y nuestro propio planeta al igual que los humanos hacemos con otras especies aquí en la Tierra" puntualizó.

jueves, 23 de junio de 2022

MISTERIO DESCONCERTANTE: ¿China recibió señales alienígenas?

En lo que bien podría considerarse como la noticia del siglo, científicos chinos dicen haber detectado lo que podría ser el rastro de una señal de una civilización extraterrestre. En efecto, los investigadores identificaron lo que llamaron señales “sospechosas” del espacio como parte de una búsqueda de evidencia de extraterrestres, y se está trabajando para determinar si podrían serlo. Las señales fueron detectadas por el radiotelescopio FAST de China, también conocido como el telescopio “Sky Eye”. Con un diámetro de plato de 487 metros, es el más grande de su tipo en el mundo, y desde el 2020 el telescopio ha estado involucrado en la investigación de vida extraterrestre. Como sabéis, hace unos días, el medio de comunicación chino Science and Technology Daily informó que los investigadores asistentes del profesor Zhang Tongjie - descrito como científico jefe del Grupo de Investigación de Civilizaciones Extraterrestres de China en la Universidad Normal de Beijing - habían encontrado una serie de “posibles rastros tecnológicos” de civilizaciones inteligentes en otros lugares del cosmos. Precisamente, el telescopio FAST funciona escaneando los cielos en busca de señales de radio específicas que podrían producirse artificialmente. Estas señales de banda estrecha deben seleccionarse del ruido de fondo de otras emisiones de radio que provienen del espacio profundo, por lo que se necesita un equipo realmente sensible. En algunos casos, el telescopio apunta a exoplanetas que orbitan estrellas distintas al sol. Science and Technology Daily informo que Tongjie y su equipo identificaron dos grupos de lo que se denominó señales “sospechosas” en el 2020 y que se identificó otra señal este año. “La posibilidad de que la señal sospechosa sea algún tipo de interferencia de radio también es muy alta, y debe confirmarse y descartarse”, dijo Tongjie a Science and Technology Daily. “Este puede ser un proceso largo”. Agregó que el equipo usaría el telescopio para repetir las observaciones de las llamadas señales sospechosas para ver si se puede obtener más información. Sin embargo, la polémica surgió cuando Science and Technology Daily eliminó el informe al poco tiempo de su publicación, sin revelarse los motivos. Pero esto no evitó que la noticia se convirtiera en tendencia en la red social Weibo y recogida por otros medios de comunicación del mundo. Varios diarios han intentado ponerse en contacto, incluido el Daily Mail, con el Observatorio Astronómico Nacional de China y Administración Espacial Nacional China, pero no han tenido respuesta. Esta no es la primera vez que un radiotelescopio recibe señales de radio no identificadas del espacio. Cuando se anuncian tales descubrimientos, provocan especulaciones sobre una posible fuente de inteligencia extraterrestre. Sin embargo, los astrónomos son reacios a confirmar que se trate de una civilización avanzada, por lo que tales señales las explican como “probablemente una fuente natural”, como una estrella altamente energética. Aunque la señal espacial misteriosa más famosa jamás detectada fue la señal Wow!, detectada por el telescopio Big Ear en la Universidad Estatal de Ohio en 1977. La señal increíblemente fuerte parpadeó durante poco más de un minuto en una frecuencia popular de radioastronomía que los científicos pensaron que podría usar una civilización extraterrestre. Cuando apareció la señal en una impresión de datos, Jerry Ehman, un científico que trabaja con el telescopio, la rodeó con un bolígrafo rojo y escribió “Wow!” junto a él. Desde entonces se desconoce la fuente de la señal. Aún así, los científicos creen que es posible que una civilización alienígena tan avanzada o más avanzada que nosotros pueda estar enviando señales de radio artificial al espacio para que las detectemos, tal como lo hicimos los humanos con el mensaje de Arecibo de 1974: una señal de radio interestelar que contenía información sobre la humanidad y la Tierra. Algunos investigadores han sugerido que debería haber decenas de miles de civilizaciones extraterrestres en nuestra galaxia y nos dicen que estamos sobreestimando cuán común podría ser la vida de inteligencia; que la vida inteligente ha decidido no transmitir información; o que simplemente no estamos viendo o entendiendo sus señales. Pero tal vez las agencias espaciales nos estén engañando sobre la existencia de vida extraterrestre inteligente y tratan de ocultar la verdad. Precisamente, apenas se dio a conocer la noticia, salieron presurosos los escépticos para tratar de desvirtuar tan sensacional hallazgo, Así, uno de los coautores estadounidenses del estudio mantiene una postura más conservadora acerca de ello. Dan Werthimer, quién es investigador de la Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre (SETI) en la Universidad de Berkeley, California, mencionó que - según él - las señales que habían sido descubiertas por el equipo, “provenían directamente de la interferencia de radio humana y no provocada por extraterrestres, ya que las fuentes naturales no suelen producir esas señales” aunque no dio razones olidas para sustentarlo. Werthimer agrega que si bien, las señales son artificiales, "casi definitivamente" provienen de humanos y no de extraterrestres. "El gran problema, y en este caso particular, es que estamos buscando señales de extraterrestres, pero lo que encontramos son un millón de señales procedentes de nuestro planeta. Son señales muy débiles, pero los receptores criogénicos de los telescopios son súper sensibles y pueden captar señales de teléfonos celulares, televisión, radar y satélites, y cada día hay más y más satélites en el cielo" aseveró. De acuerdo con LiveScience, “la interferencia en el telescopio FAST, es un gran problema por su escala y sensibilidad, ya que por su tamaño de 500 metros es suficientemente potente para detectar dispositivos de radio como los de la Tierra que funcionan a muchos años luz de distancia”. Además Werthimer comenta que “con el número cada vez mayor de satélites orbitando la Tierra, el problema solo empeorará, por lo que es probable que dentro de 100 años la ventana de búsquedas SETI no sean posibles, porque todas las señales de radio estarán corrompidas por las señales generadas por los humanos”. Incluso se atreve a señalar que “si los extraterrestres enviaran o filtraran señales involuntariamente a través del cosmos, es posible que estas no se encuentren codificadas en ondas de radio, sino configuradas de maneras para las que la humanidad todavía no ha desarrollado tecnología para poder comprenderlas”. Ante estos cuestionamientos, los colaboradores chinos de Werthimer, comentaron que “quizás existía una alta probabilidad de que las señales fueran originadas en la Tierra”. En su informe, Zhang Tongjie, mencionó que la posibilidad de que la señal sospechosa “podría ser algún tipo de interferencia de radio era bastante grande, por lo que debían realizar nuevas investigaciones para confirmarla o descartarla”. Solo nos queda esperar para saber “oficialmente” si se ha descubierto una señal de vida extraterrestre inteligente o no. El tiempo lo dirá y esperemos que no sigan ocultando la verdad.

jueves, 16 de junio de 2022

¿SE RINDE POR FIN ANTE LAS MÚLTIPLES EVIDENCIAS?: La NASA anuncia oficialmente que investigará los OVNIS

Durante años son muchos los que han asegurado haber visto extraños objetos en nuestros cielos, incluso lograron fotografiarlos o los grabaron en video. Pero nadie les creyó, no les creían o directamente los tomaron cómo locos. Sin embargo, el tiempo les ha dado la razón y hemos visto cómo el fenómeno OVNI ha recobrado un interés renovado e incluso ha sido reconocido oficialmente. Pero lo último que esperábamos es que la mismísima agencia espacial estadounidense (NASA) recién se uniera a su estudio. En efecto, según da cuenta esta semana The Sun, la NASA ha anunciado que estudiará oficialmente los fenómenos aéreos no identificados (UAP), conocidos popularmente como OVNIS, misteriosos objetos en el cielo que no pueden identificarse absolutamente como aeronaves o fenómenos naturales conocidos. En el estudio que durará unos nueve meses, los científicos analizarán los datos actuales de las UAP y establecerán qué avistamientos ocurren de forma natural o no merecen una mayor investigación. La comprensión de fenómenos no identificados en la atmósfera es de interés tanto para la seguridad nacional de los EE.UU. como para la seguridad de las aeronaves. Cualquier resultado encontrado durante el pionero estudio se hará público. Los investigadores que participen en el programa se centrarán en identificar los datos disponibles y cuál es la mejor manera de recopilar datos futuros. También analizarán cómo la NASA puede usar esos datos para avanzar en la comprensión científica de esos extraños objetos de origen desconocido. Las fuentes de datos de UAP incluyen civiles, gobiernos, organizaciones sin fines de lucro, empresas y, potencialmente, astronautas que encontraron objetos no identificados en el espacio. Los expertos también pueden revisar imágenes y datos de misiones anteriores para ayudar a investigar cualquier encuentro anómalo. Otro objetivo de la NASA es profundizar la credibilidad en este campo de estudio. “Existe un gran estigma asociado con UAP entre nuestros aviadores navales y la comunidad de aviación”, dijo Daniel Evans, funcionario de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA. “Una de las cosas que tangencialmente esperamos hacer como parte de este estudio, simplemente hablando de él abiertamente, es ayudar a eliminar parte del estigma asociado con él, y eso producirá obviamente un mayor acceso a los datos, más informes, más avistamientos” expresó. Como sabéis, la agencia espacial estadounidense especialista en ocultar la verdad, siempre ha manifestado que “no existe evidencia actual de que los UAP sean de origen extraterrestre”, o cualquier indicación de vida extraterrestre inteligente, pero ahora afirman “que tampoco lo han descartado” al hacer su anuncio. “La NASA cree que las herramientas del descubrimiento científico son poderosas y se aplican aquí también”, dijo Thomas Zurbuchen, administrador asociado de ciencia de la NASA en Washington. “Tenemos acceso a una amplia gama de observaciones de la Tierra desde el espacio, y ese es el elemento vital de la investigación científica. Tenemos las herramientas y el equipo que pueden ayudarnos a mejorar nuestra comprensión de lo desconocido. Esa es la definición misma de lo que es la ciencia. Eso es lo que hacemos”. La NASA contará con la ayuda de expertos en ciencia, aeronáutica y análisis de datos para ayudar a resolver los misterios de los OVNIS. También se han coordinado con el gobierno de los EE.UU. para evaluar cómo utilizar mejor las herramientas científicas disponibles, pero están trabajando independientemente del Departamento de Defensa o las agencias de inteligencia. El estudio será dirigido por David Spergel, presidente de la Fundación Simons, una organización benéfica que apoya la investigación científica, y ex presidente del departamento de astrofísica de la Universidad de Princeton. “Dada la escasez de observaciones, nuestra primera tarea es simplemente recopilar el conjunto de datos más sólido que podamos”, continúa explicando Evans. “Identificaremos qué datos (de civiles, gobiernos, organizaciones sin fines de lucro, empresas) existen, qué más debemos tratar de recopilar y cómo analizarlos mejor. De acuerdo con los principios de apertura, transparencia e integridad científica de la NASA, este informe se compartirá públicamente. Todos los datos de la NASA están disponibles para el público, nos tomamos esa obligación en serio, y los hacemos fácilmente accesibles para que cualquiera pueda verlos o estudiarlos”. Sin embargo, aunque pueda parecer una buena noticia, la comunidad ufológica se ha mostrado realmente preocupada. Muchos ufólogos consideran que la NASA perseguirá a todos aquellos que investigan o hayan denunciado públicamente la presencia de OVNIS y tengan evidencia de ello. Por ejemplo, los miembros del Mutual UFO Network (MUFON), o famosos ufólogos como Scott C. Waring, Nick Pope o Luis Elizondo podrían ser perseguidos, e incluso eliminados, tal como le ocurrió a Max Spires, quien murió en misteriosas circunstancias luego una conferencia sobre OVNIS en Polonia. Es más, algunos escépticos aseveran que el verdadero motivo de este estudio de la NASA es acumular toda la información posible sobre los OVNIS, para que al final como los del famoso Proyecto Libro Azul (una serie de estudios sobre el fenómeno OVNI por parte de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, comenzado en 1952, y estuvo activo hasta diciembre de 1969), digan que “no encontraron pruebas concluyentes acerca de la existencia de vida alienígena”. Aun así, solo nos queda esperar para saber si la NASA por fin se atreverá a develar la verdad o, como siempre, nos ocultará la existencia de vida inteligente más allá de nuestro planeta.

jueves, 9 de junio de 2022

THE BEACON IN THE GALAXY: Un controversial proyecto con el cual pretenden encontrar vida alienígena exponiendo a la Tierra

"Si una persona se pierde en una zona remota, tiene dos opciones. Puede ponerse a buscar la civilización, o puede hacer que la vean fácilmente encendiendo una hoguera o escribiendo AYUDA en letras grandes"; así comienza Chris Impey su artículo en Space. Impey, quien se desempeña como profesor distinguido de Astronomía en la Universidad de Arizona, cree que este mismo plan podría funcionar para encontrar vida extraterrestre de tipo inteligente. Hasta ahora, los humanos hemos calculado un aproximado a 300 millones de mundos posiblemente habitables solo en la Vía Láctea, nuestra propia galaxia. Por eso, muchos científicos se encuentran bastante confiados en que existe vida más allá de la Tierra, en algún rincón del universo. Eso es lo que ha estado haciendo el instituto SETI por más de 70 años; intentar buscar señales de existencia en otro planeta. Hasta ahora, sin embargo, los científicos solo han encontrado el misterio llamado "El Gran Silencio", en su búsqueda por una civilización desarrollada. ¿Dónde están? El físico italiano Enrico Fermi planteó esta pregunta en 1950, y ahora se conoce como la Paradoja de Fermi o El Gran Silencio. Fermi se preguntaba: si existen otras civilizaciones en otros planetas de nuestra Vía Láctea; y si algunas se han extendido por la galaxia como han conjeturado tanto la ciencia ficción como los científicos, ¿por qué no hemos tenido noticias de ellas? ¿O nos ven demasiado primitivos para interesarse por nosotros? Mientras que el SETI se dedica a buscar señales en el espacio exterior, el METI - conocido también como SETI activo- es un intento de los científicos por dar a conocer la posición de la Tierra a todos los posibles habitantes de nuestra galaxia. Según comenta Chris Impey para Space en los próximos meses un grupo de astrónomos enviará mensajes al espacio. ¿El motivo? Esperan conectar con extraterrestres que estén dispuestos a escuchar. Impey describe estas intenciones como "construir una fogata en el bosque esperando a que alguien te encuentre"; y entra al debate sobre si este es un movimiento es riesgoso o no. Corría el año 1972 cuando el mundo vio el lanzamiento de las sondas espaciales gemelas, Pioneer 10 y Pioneer 11. En ambas naves, iba adjuntada la conocida Placa de la Pioneer, diseñadas por el astrónomo Carl Sagan y Frank Drake. En estas placas se aprecian dos figuras humanas, una femenina y otra masculina; y están basadas en las esculturas griegas y los dibujos de Leonardo Da Vinci. Asimismo, a la izquierda se encuentra un haz de líneas que parten de un mismo punto. Este centro hace referencia al Sol, mientras que las líneas serían los púlsares más significativos que se encuentran en nuestro sistema solar. Además, tenemos en números binarios su secuencia de pulsos. De esta forma, se intentó representar nuestra ubicación en el espacio, algo que podría ser interpretado por otra civilización tecnológicamente avanzada. Mas adelante, en 1977, las naves Voyager 1 y Voyager 2 partieron de la Tierra. En su interior contenían una especie de 'cápsula del tiempo', otro intento de comunicarnos con otras especies vivientes más allá de nuestra atmósfera. Ambas naves contenían una grabación fonográfica en forma de disco de 12 pulgadas fabricado en cobre, y cubierto de oro. Los discos contenían imágenes y sonidos de la diversidad terrestre, así como también de la cultura humana. Al igual que las placas de las Pioneer, los discos de las Voyager incluyen detalles que señalizaban nuestra ubicación en el espacio. Aunque ambos intentos ya dejaron el sistema solar, el espacio es increíblemente enorme. Por esto, las posibilidades de que una civilización avanzada encuentre un objeto flotando en la mitad de la nada "son fantásticamente minúsculas, a menos que las encuentren en su camino", describe Chris Impey en su artículo. Sin embargo, la radiación electromagnética es un método mucho mejor. Por ello, en el año 1974, desde el Observatorio de Arecibo en Puerto Rico se emitió el primer mensaje diseñado exclusivamente para oídos extraterrestres. Conformados por números binarios, contenían información básica sobre la humanidad y la biología, y fue enviado en dirección al clúster M13. Pero hay un problema, M13 está a 25.000 años luz de distancia, por lo que en caso de obtener una respuesta, tendremos que esperar muchísimo tiempo para escucharla. Además de estos intentos deliberados de enviar un mensaje a los extraterrestres, desde hace casi un siglo se filtran al espacio las señales de las emisiones de televisión y radio. Esta burbuja de parloteo terrestre, en constante expansión, ya ha llegado a millones de estrellas. Pero hay una gran diferencia entre una ráfaga concentrada de ondas de radio procedente de un telescopio gigante y una fuga difusa: la débil señal de un programa televisivo se desvanece por debajo del zumbido de la radiación sobrante del Big Bang al poco tiempo de abandonar el sistema solar. Ahora, a casi 50 años del mensaje lanzado en el Observatorio de Arecibo, dos nuevos grupos de astrónomos se han puesto manos a la obra nuevamente. En sus intentos de comunicación extraterrestre, el primer grupo usará un telescopio de radio gigante; sin embargo, el otro tendrá un acercamiento ligeramente distinto. Este primer grupo usará el telescopio de radio más grande del mundo, ubicado en China. El mensaje tiene planeado enviarse en algún punto del 2023, y este inmenso aparato tecnológico de 500 metros de diámetro será su origen. De esta forma, los científicos enviarán mensajes cifrados en código binario de 1 y 0, conteniendo información en formato digital. " The Beacon in the Galaxy ", es el nombre que recibe este mensaje. Incluye números primos y operaciones matemáticas, la bioquímica de la vida, formas humanas, la ubicación de la tierra y una marca de tiempo. En esta ocasión, el destinatario serán millones de estrellas cercanas al centro de la Vía Láctea, ubicadas a una distancia aproximada a los 10.000 y los 20.000 años luz. Obviamente, el objetivo es mucho mayor al del intento del Arecibo, pero nos tomará mucho tiempo escuchar una respuesta. El segundo grupo, por su parte, planea enviar su mensaje a una única estrella. Eso sí, con una posibilidad de respuesta mucho más rápida. Se espera que este próximo 4 de octubre, un grupo de la Goonhilly Satellite Earth Station, ubicado en Inglaterra, emita su mensaje a la estrella TRAPPIST-1. Orbitándola, encontramos 7 planetas, de los cuales tres se encuentran en la denominada "Zona Goldilocks". Esto significa que están posicionados en la ubicación necesaria para, posiblemente, contener líquidos y una vida extraterrestre potencial. Además, TRAPPIST-1 se encuentra a solo 39 años luz de distancia, por lo que al equipo le tomaría unos 78 años enviar el mensaje y recibir uno de regreso a la Tierra. A raíz de estos movimientos, han surgido algunas inevitables preguntas éticas. Por ejemplo, está la denominada "¿Quién habla por la Tierra?", y es que actualmente no existe ningún tipo de consulta a nivel internacional sobre los mensajes que deberían ser incluidos dentro de estos intentos. De hecho, la mayoría de las decisiones las toma un puñado de científicos y grupos interesados en el tema. Pero hay otras más serias. Aunque es la idea de incendiar un bosque para atraer la atención de posibles rescatistas, también podría correr el peligro de atraer otro tipo de amenazas. Stephen Hawking advirtió, en su momento, sobre los riesgos de contactar a alienígenas con una tecnología superior. Según comentaba el físico, estos seres podrían ser de temperamento hostil, y querer destruir a la humanidad. Sin embargo, otros científicos creen que no existe un riesgo serio, dado que en caso de que los extraterrestres posean una tecnología superior a la nuestra, es probable que ya sepan de nuestra existencia en primer lugar. No obstante, parece que tendremos que esperar bastante más para ver las respuestas a todas estas preguntas. “Al fin y al cabo, de momento no hemos podido contactar oficialmente con los alienígenas, la posibilidad de que ellos venga en nuestra busca está cada vez más lejana” estiman los científicos. Pero quién sabe, tal vez antes de lo que nos imaginemos podamos sorprendernos de lo que aparezca en el cielo… y precisamente, no con buenas intenciones.

jueves, 2 de junio de 2022

LA ENIGMÁTICA CONSTRUCCIÓN ANTEDILUVIANA DE OKLAHOMA: ¿Una estructura de 200.000 años de antigüedad?

En 1969, unos trabajadores de la construcción de Oklahoma se tropezaron con una estructura que, según muchos autores, podría reescribir la historia: los restos de una estructura de 200.000 años de antigüedad. Al respecto, el periódico The Oklahoman cubrió la historia en 1969, creando un acalorado debate entre los expertos. ¿Podría el “antiguo suelo de mosaico” de Oklahoma reescribir la historia no sólo de Norteamérica sino también de todo el planeta? Según el reportaje del periódico, la estructura descubierta por los obreros en Oklahoma se remontaría hasta hace, aproximadamente, 200.000 años. Como sabéis, en casi todos los rincones del mundo, investigadores y arqueólogos se han topado con hallazgos que difícilmente se pueden explicar. Uno de esos descubrimientos se produjo en Oklahoma, en 1969, cuando un arqueólogo fue testigo de lo que describió como “un suelo de mosaico masivo, con extraños agujeros”. Pronto surgieron las preguntas, iniciando los científicos un gran debate: ¿qué antigüedad tenía ese piso? ¿Se trataba de una formación natural o artificial? Aparecieron muchos interrogantes que los científicos no pudieron contestar, y algunos incluso afirmaron que tan enigmático suelo estaba datado en unos 200.000 años de antigüedad. Muchos estaban convencidos de que aquello era el resultado de una construcción creada por el hombre y no por la naturaleza. Pero si era tan antiguo, ¿quién podría haberlo creado? ¿Y si el enigmático suelo era lo único que quedaba de una estructura mucho mayor? Obviamente, lo más importante del descubrimiento es la antigüedad de la estructura. ¿Cómo concluyeron que era de hace 200.000 años? La primera mención se remonta a The Oklahoman, único diario regional que cubría el área de la Gran Oklahoma City. Según el periódico, Delbert Smith, presidente de la Oklahoma Seismograph Co. y ex presidente de la Sociedad Geofísica de Oklahoma City, así como Durwood Pate, geólogo independiente, viajaron al lugar para estudiar el área y tomar muestras. En junio de 1969, el diario publicó: “El 27 de junio de 1969, unos obreros que trabajaban realizando cortes en una roca situada en la extensión 122 de la calle Broadway, entre Edmond y la ciudad de Oklahoma, realizaron un hallazgo que crearía mucha controversia entre los expertos. (…) El lugar parecía tener un suelo de mosaico incrustado. (…) Estoy seguro de que esto fue hecho por el hombre porque las piedras se colocaron en perfectos conjuntos de líneas paralelas que se cruzan para formar una forma de diamante, todo apuntando hacia el este», afirma Durwood Pate, un geólogo de Oklahoma City que ha estudiado el hallazgo. (…) Encontramos hoyos de postes que miden dos varas perfectas. La capa superior pétrea es muy lisa, y si levantas alguna piedra, encontrarás que es muy dentada, lo que indica desgaste en la superficie. Todo está demasiado bien colocado para ser una formación natural. (…) El Dr. Robert Bell, arqueólogo de la Universidad de Oklahoma, expresó su opinión de que el hallazgo era una formación natural. El Dr. Bell dijo que no podía ver ninguna evidencia de señales de mortero. Pero Pate, por otra parte, fue capaz de distinguir una especie de barro entre cada piedra. Delbert Smith, geólogo y presidente de la Compañía de Sismógrafos de Oklahoma, dijo que la formación, que fue descubierta unos 0,9 metros por debajo de la superficie, parecía cubrir varios miles de pies cuadrados. (…) El Tulsa World citó a Smith diciendo: ‘No hay duda de ello. Había sido puesto allí, pero no tengo idea de por quién’” acotó. “Estoy convencido de que no es una formación natural de la Tierra y que ha sido hecho por el hombre», añadió más tarde, quien resumió el misterio concerniente al piso de baldosas en “El Mundo de Tulsa” del 29 de junio de 1969 diciendo: “No hay duda de ello. Había sido puesto allí, pero no tengo idea de por quién. Otra faceta del misterio implicaba la cuestión de la antigüedad. Hay algunas opiniones diferentes en cuanto a la geología implicada, pero la mejor estimación sitúa las baldosas en 200.000 años.” El 1 de julio de 1969, The Oklahoman volvió a informar sobre el descubrimiento de un segundo agujero a través de los estratos rocosos. Las mediciones revelaron dos agujeros para ser exactos, a 16,5 pies de distancia, exactamente una vara. Según Pate, “la roca es caliza permiana unida con granos de cuarzo”. Posteriormente, el 3 de julio, The Oklahoman continuó con su cobertura, informando de este modo: “los arqueólogos desplazados descubrieron un antiguo martillo de piedra en el lugar” lo que hizo más extraño el asunto. “El misterio de una formación dolomítica de piedra caliza desenterrada entre Oklahoma City y Edmond fue confirmado el miércoles con el descubrimiento de un objeto en el lugar que se asemeja a un martillo de piedra. Geólogos que han centrado su atención en la inusual formación, no podían explicar el origen de la misma ni del artefacto. John M. Ware, geólogo de la ciudad de Oklahoma, dijo que ‘simplemente no se puede explicar en el campo de la geología: necesitamos un arqueólogo para dar una opinión final’. Sin embargo, su antigüedad y su origen pueden seguir siendo un misterio a menos que un arqueólogo pueda ser persuadido pronto para ponerse al frente del proyecto. Dentro de 20 días, los trabajadores de la construcción continuarán su trabajo de excavar la zona para comenzar a construir un almacén de alimentos... Otro punto intrigante sobre la roca es que contiene depósitos marinos… Pate dijo que la formación, de 100 pies por 60 pies de superficie, se está convirtiendo rápidamente en una atracción turística. ‘La gente está acudiendo allí y llevándose pedazos de la roca’, dijo. ‘Necesitamos preservarlo hasta que se pueda hacer algo para determinar su origen’” añade la publicación. Parece que estas líneas lograron crear un gran escándalo sobre un descubrimiento que habría sido tratado de manera totalmente diferente si nadie hubiera mencionado precisamente los datos de sus aparentes 200.000 años de antigüedad. Sin embargo, existen más curiosos hallazgos que se han encontrado en Oklahoma. Uno de ellos fue descubierto en 1912 en una mina de Wilburton por Frank J. Kennard: se trata de una especie de cazuela de hierro incrustada dentro de un trozo de carbón. El carbón que se originó de las minas de Wilburton, Oklahoma, se estimó en aproximadamente 300 millones de años de antigüedad. Kennard explicó al respecto: “Mientras trabajaba en la Planta Eléctrica Municipal de Thomas, Oklahoma, en 1912, me encontré con un sólido trozo de carbón que era demasiado grande para ser usado. Lo rompí con un martillo. Esta olla de hierro cayó del centro dejando el molde de impresión de la olla en la pieza de carbón. Jim Stall (un empleado de la compañía) fue testigo de la rotura del carbón y vio caer la olla. Rastreé el origen del carbón y descubrí que provenía de las minas de Wilburton, Oklahoma.” Desafortunadamente, el descubrimiento del antiguo piso de mosaico en Oklahoma plantea más preguntas que respuestas, debido a que ya no existe, porque fue destruida por los mismos que lo descubrieron para dar paso a las obras que tenían programadas en el lugar, por lo que la antigüedad del sitio no pudo ser determinada por los arqueólogos, quienes no pudieron investigar más este intrigante sitio. Realmente es una pena que ello haya ocurrido porque este descubrimiento podría haber reescrito fácilmente la antigua historia de la humanidad.