TIEMPOS DEL MUNDO

jueves, 26 de noviembre de 2020

DE PROCEDENCIA DESCONOCIDA: Descubren un misterioso monolito de metal en las profundidades del desierto en Utah (EE.UU.)

Lo que comenzó como una rutinaria operación de asistencia para la vida silvestre tomó un giro inesperado luego de que agentes del Departamento de Seguridad Pública de Utah se toparan con un misterioso monolito en medio de una zona rural de difícil acceso en Utah. En efecto, agentes de la unidad Aero Bureau, del Departamento de Seguridad Pública de Utah, volaban en helicóptero el miércoles pasado, en apoyo a la División de Recursos de Vida Silvestre para contar la existencia de borrego cimarrón en el sureste de Utah, cuando vieron algo que parecía sacado de “2001: Odisea del Espacio” de Stanley Kubrick. Como recordareis, en esa película unos monos encuentran un monolito negro que les permite avanzar en la evolución, una de las escenas más comentadas y simbólicas del cine de todos los tiempos. “Uno de los biólogos… lo vio y casualmente volamos directamente sobre él”, dijo el piloto Bret Hutchings, según publica Daily Mail “Él estaba como, ‘¡Espera, espera, espera, date la vuelta, date la vuelta!’ Y yo estaba como, ‘¿Qué?’ Y él dice, ‘Hay una cosa allá atrás, ¡tenemos que ir a verla!'”. Y allí estaba. En el medio de las enormes rocas rojas había un monolito de metal plateado brillante que sobresalía del suelo “con un brillo en marcado contraste con las piedras que lo rodean”. Hutchings calculó que tenía entre 3 y 3,5 metros de altura. No parecía que se hubiera caído al suelo al azar, sino que parecía que había sido plantado en la superficie. “Bromeamos acerca de que si uno de nosotros desaparecía repentinamente, el resto de nosotros huiríamos”, dijo Hutchings. Sin embargo - agregó - “es ilegal instalar estructuras sin autorización en terrenos públicos sin importar de qué planeta sea”, dijo el Departamento de Seguridad Pública de Utah en un comunicado el lunes. Algunos observadores creen que la escultura podría ser del artista John McCracken, que vivió en Nueva York hasta su muerte. En su página web se pueden ver monolitos semejantes, pulidos hasta parecer espejos. Sin embargo, su galerista, David Zwirner, no ha realizado ninguna declaración al respecto. Como es obvio, los seguidores de Kubrick celebran el descubrimiento: "Me encanta esto. Me imagino que es una obra de arte, ¿pero qué pasa si no lo es y es de origen extraterrestre?" se preguntan. '2001: Una odisea del espacio' se estrenó hace más de medio siglo (el 17 de octubre de 1968) y cuyo final abierto con multitud de alegorías la han convertido en una película de culto. En la escena final, una de las más comentadas, vuelve a aparecer un monolito, esta vez el que se acerca a él es un astronauta, ya muy viejo, que extiende su mano hacia él mientras suena la mítica banda sonora con la interpretación de 'Así habló Zaratustra', de Richard Strauss. Cabe destacar que no se ha revelado la ubicación del monolito por temor a que los exploradores aficionados se queden atrapados en el desierto mientras intentan encontrarlo y aún no está claro quién, o qué, lo colocó allí. A pesar de esta advertencia, los internautas no tardaron en desafiarla e iniciaron su búsqueda a través de Google Earth. Así, gracias a los resultados del programa informático que muestra imágenes satelitales de la Tierra, los participantes del foro 4chan descifraron que el objeto ha permanecido en el lugar durante cuatro años sin que nadie lo note. A su vez, un usuario de la red social Reddit sugirió que el monolito fue colocado en las coordenadas 38.343080 °, -109.666190 °. "Se instaló en algún momento después de agosto de 2015. Antes de que pregunten, soy bueno para encontrar cosas", agregó. No obstante, otros creen que ha permanecido allí por muchos años más. "En realidad, hay una roca negra en el lado izquierdo de la montaña que sirve como mejor punto de referencia. No pude obtener medidas exactas, pero definitivamente parece que estaba allí al menos en el 2013, con otros posibles monolitos encima. Bastante extraño", tuiteó una usuaria al compartir más fotografías. El último archivo de imágenes satelitales de Google del sitio corresponde a 2016 y desde entonces ya se puede observar la estructura, por lo tanto se presume fue erigida entre agosto del 2015 y octubre del año siguiente. Además, según los cálculos está a menos de una milla de lo que parece ser un sendero.Todavía es un misterio quién puso el monolito allí y con qué objetivo. Mientras, se busca la procedencia o autor de este extraño y misterioso hallazgo.(Para actualizar la nota, lamentablemente debemos informar que la noche del viernes, el famoso monolito fue robado por uno de los visitantes que comenzaron en llegar en masa al lugar - quienes desafiando a las autoridades, lograron encontrar las coordenadas a través de Google Earth - y hoy se desconoce su paradero, lo cual como es obvio solo acrecentará el misterio de su origen)

jueves, 19 de noviembre de 2020

GÁRGOLAS: Silenciosos vigilantes de la oscuridad

Las hemos visto en películas, hemos leído sobre ellas y nos han observado desde las alturas cuando paseamos por los alrededores de las iglesias, catedrales y castillos de Europa. Las gárgolas son terrores nocturnos y guardianes a la vez, monstruosas criaturas de piedra que acechan a los malvados y protegen las construcciones sagradas desde hace siglos. Estas figuras vivieron su auge durante la Edad Media, con la arquitectura gótica, pero llevan con nosotros mucho más tiempo.¿Sabemos para qué sirven realmente y qué representan? ¿Son gárgolas todas las figuras a las que les damos ese nombre? Empezar por el principio suele ser una buena opción. El término ‘gárgola’ viene del latín gurgulio (garganta) y a su vez este es un préstamo del griego γαργαρίζω (hacer gárgaras). Se trata de piezas talladas con forma de animales (reales o fantásticos) o personas que se colocan al final de los conductos que canalizan el agua desde los tejados del edificio hasta el suelo para que caigan y no dañen los muros o se acumulen en el techo. Aunque, como ya hemos señalado, se popularizaron en el Medievo y especialmente con la arquitectura gótica, las gárgolas ya eran utilizadas en la Edad Antigua por civilizaciones como la egipcia, la griega o la romana. Todavía se pueden apreciar algunas de las piezas que se colocaban en los palacios de Pompeya para filtrar el agua. En un principio, los aspectos más comunes que se daban a las gárgolas eran las de animales reales que guardaran algún simbolismo para quienes las hacían como aves, leones o perros. Las figuras cuentan con un canal en la espalda que está unido al sistema de canalización por el que el agua que ha caído sobre el tejado discurre hasta la gárgola y cae a través de su boca. Para conseguir que el agua cayera a cierta distancia de los muros del edificio, se las representaba con gargantas muy largas o con todo el cuerpo en lugar de solo la cabeza. Por eso son protuberantes y, cuanto más sobresalientes son, mejor cumplen su labor, expulsando el agua lejos de las paredes de piedra que conforman su estructura. La caída de Roma del año 476 dio paso de la Edad Antigua a la Edad Media y con ella grandes cambios para el mundo entero. En Europa, la influencia de la Iglesia Católica creció hasta límites insospechados y fue en sus lugares de culto donde las gárgolas encontraron un nuevo refugio. Curiosamente, fue en estos momentos cuando las figuras de animales reales pasaron a un segundo plano y fueron las criaturas fantásticas (grothesque) las que poblaron los canalones de los edificios. Seguía siendo posible ver figuras humanas o de animales como leones, águilas o toros pero cada vez fue más común encontrarse con demonios, dragones, arpías, sirenas, grifos o híbridos de hombre y bestia. La Iglesia Catolica, conocedora de la escasa educación que tenía el pueblo llano y obcecada en su cruzada moralizante, introdujo en la estética de sus fachadas a estas criaturas malignas afirmando que eran un símbolo de protección ya que se mantenían fuera de la iglesia o la catedral en la que se posaban, ahuyentaban a los malos espíritus y confirmaban que el interior del edificio era perfectamente seguro para esas pobres almas que buscaban la salvación. También contamos con un origen mitológico en el que San Román mató a un dragón (Gargouille) mostrándole la cruz y, al no poder quemar ni su cabeza ni su cuello que eran inmunes al fuego, decidió colgarlos de los muros de su iglesia como advertencia. De esta forma, el gótico, el romanticismo y el neogótico mantuvieron vivas a las gárgolas y consiguieron que sobrepasaran su concepción como simple decoración o elemento aleccionador. Con el paso de los años, el término gárgola pasó a referirse a un tipo de criaturas concretas, similares a un demonio alado, que o bien eran siempre de piedra o se convertían en piedra y que empezaron a formar parte de las leyendas y la literatura fantástica hasta ser una criatura por sí misma. Muchos nos sorprenderemos al saber que las legendarias e hiperfotografiadas gárgolas de la hermosa catedral de Notre Dame, esas mismas que menciona Víctor Hugo y que Disney convirtió en una película, no son gárgolas sino quimeras. La gran diferencia radica en la utilidad: las gárgolas siempre cuentan con un canalón o conducto por el que sale agua y siguen un fin práctico mientras que las quimeras son figuras que, aun imitando la forma de las gárgolas, son puramente decorativas. Cabe destacar que estas estatuas que vigilan con sus ojos demoníacos a los cerca de 13 millones de turistas que visitan la catedral cada año y que están tan ligadas a la imagen de Notre Dame no forman parte de su construcción original, finalizada en 1345. Fueron añadidas recién a mediados del siglo XIX, durante un proyecto de restauración que se desarrolló entre 1843 y 1864, liderado por los arquitectos Eugène Viollet-le-Duc y Jean-Baptiste Lassus, quien falleció antes de que se completara la obra. Desde entonces, custodian fieramente la catedral y se han hecho parte inseparable de ella.

jueves, 12 de noviembre de 2020

MISTERIOS DE LA BIBLIA: El enigmático libro de Enoc

Ante todo, cabe destacar que se trata de un libro intertestamentario, que si bien forma parte del canon de la Biblia de la Iglesia ortodoxa etíope, no es aceptado como canónico por las demás iglesias cristianas a pesar de haber sido encontrado en algunos de los códices de la Septuaginta (Códice Vaticano y Papiros Chester Beatty). De autor desconocido, la tradición atribuía su autoría a Enoc, bisabuelo de Noé y en la actualidad se cree que el texto fue redactado por varios autores judíos entre los siglos III a. C. y I d. C. Se conocen otros tres Libros de Enoc: el Segundo Libro de Enoc (2 Enoc), escrito a finales del siglo I y conservado en eslavo eclesiástico; el más tardío (de composición posterior al siglo V), Tercer Libro de Enoc (3 Enoc), en hebreo; y el Enoc copto (4 Enoc), que data del siglo V y del cual apenas se han encontrado partes. Este artículo solo hace referencia a 1 Enoc. Las únicas versiones íntegras de este libro que se conservan están en ge'ez, lengua litúrgica de la Iglesia etíope, pero son conocidas varias partes en griego, y un fragmento en latín. También ha sido encontrado, en Antínoe, un fragmento en copto (93:3-8) y, además en Qumrán fueron hallados múltiples fragmentos en arameo y uno en hebreo (4Q317). El libro que hoy se conoce fue editado tal vez en el siglo I d. C., y consta de varias partes escritas entre los siglos III a. C. y I d. C. En cuanto a su contenido, en el capítulo 7 (7:3-6) narra la caída de los Vigilantes, que engendraron con mujeres humanas a los nephilim o ‘gigantes’ a quienes se refiere el pasaje de Génesis 6:1-7: “Ellos devoraron todo el trabajo de los hombres hasta que estos ya no alcanzaron alimentarlos más. Entonces los gigantes se volvieron contra los hombres y empezaron a devorarlos y empezaron a pecar contra los pájaros, y contra las bestias y los peces y a devorar unos la carne de los otros y se bebieron la sangre. Entonces la tierra acusó a los violentos por todo lo que se había hecho en ella”. Se acusa a los ángeles guardianes por haber desviado su misión y encarnado la explotación, la opresión, la destrucción de los ecosistemas, la guerra, el oro, la vanidad, la brujería, la fornicación y el engaño (8:1-3). “Y como parte de la humanidad era aniquilada, su clamor subió al cielo” (8:4). Los arcángeles Miguel, Sariel (Uriel), Rafael y Gabriel, al ver la sangre derramada y la injusticia se dijeron que “la tierra desolada grita hasta las puertas del cielo por la destrucción de sus hijos”. Dios los envía entonces a encadenar a los Vigilantes y a destruir a los gigantes ya que han oprimido a los humanos. Los ángeles caídos rogaron a Enoc que intercediese por ellos y los gigantes ante Dios. Luego el libro describe la visita de Enoc al cielo, y sus revelaciones. Una parte significativa del texto se dedica a describir los movimientos de los cuerpos celestes, en relación con el viaje de Enoc al cielo, con el objetivo de detallar el calendario base de las fiestas de la Ley. Este libro se cree que fue muy apreciado por parte de los primeros cristianos, a partir la referencia de la epístola de Judas 1:14-16, que cita un pasaje del Libro de Enoc (1 Enoc 1:9); la referencia en 2 Pedro 2:4 y la Epístola de Bernabé (16:4), que cita como Escritura un versículo (1 Enoc 89:56) y en 4:3 se refiere a 1 Enoc 80:2. Si bien muchos Padres de la Iglesia y cristianos destacados se refieren al libro, y lo citan en sus obras y lo consideraron como un libro de inspiración divina, 1 Enoc fue definitivamente apartado del canon tras el Concilio de Laodicea, en 364, debido a la contradicción de fechas y no contar con la antigüedad debida. Lo que llama la atención de este libro - que más bien parece relatar los encuentros de Enoc con extraños y poderosos seres extraterrestres, que lo hubiesen abducido, y sus gigantescas naves espaciales, con varios niveles - es el destino del propio Enoc, quien no muere, sino “que es llevado al cielo por Dios, quien lo transformó en el ángel Metatrón”. Para los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (conocidos como “mormones“), Enoc fundó la ciudad justa de Sion en un mundo pecaminoso. Él y los habitantes de toda la ciudad fueron “trasladados” por Jehová y se esfumaron de la superficie de la Tierra antes del Gran Diluvio “dejando a Matusalén y su familia (incluido Noé) para que gente justa siguiera poblando la Tierra”. No cabe duda que la controversia en cuanto a este libro continuara por los siglos de los siglos.

jueves, 5 de noviembre de 2020

¿SOLDADOS RUSOS CONVERTIDOS EN PIEDRA POR EXTRATERRESTRES?: Publican revelador archivo secreto de la KGB

En los últimos tiempos se ha vuelto cada vez mas común que, diversos organismos de inteligencia den a conocer, a través de la Red, una serie de archivos que por varios años permanecieron ocultos para el público “por razones de seguridad nacional”. Por lo general, dichos documentos narran ciertos avistamientos de Objetos Voladores No Identificados que han sido investigados posteriormente por entidades gubernamentales con el objetivo de saber si efectivamente estas crónicas tienen explicación lógica o permanecen bajo la categoría de lo paranormal. Según una noticia dada a conocer esta semana por The Sun, la CIA desclasifico un supuesto incidente que se produjo en Rusia, donde se habla de un grave enfrentamiento entre soldados rusos y los extraterrestres. Esta información es una traducción hecha por la CIA de una nota publicada por el periódico ucraniano Ternopil Vechirniy. Ante todo, cabe resaltar que tras el derrocamiento de la dictadura comunista y el colapso de la Unión Soviética en 1991, muchos archivos de la KGB (organismo de inteligencia soviético) llegaron a la CIA, incluyendo un dossier de 250 páginas sobre este extraño ataque que incluyó fotos y testimonios de testigos. El informe indicaba que un objeto de origen desconocido apareció sorpresivamente sobre una unidad militar rusa que se encontraba en entrenamiento en Siberia. Cuando esto se produjo, uno de los soldados disparó un misil que logró impactar al OVNI, que se precipito a tierra. Lo que nadie esperaba, era que desde la nave derribada bajaran “cinco humanoides de baja estatura que contaban con grandes cabezas y grandes ojos negros, quienes se fusionaron en una brillante bola de luz esférica blanca que zumbaba y silbaba. Entonces esta esfera de luz explotó y, en ese momento, 23 soldados que se quedaron mirando la explosión quedaron convertidos en piedra”, según aparece escrito en el informe. Solo dos soldados que habían estado en un área sombreada lograron pudieron sobrevivir al ataque, quienes tras salir de los escombros huyeron del lugar y relataron lo que acababan de vivir a sus altos mandos. El reportaje del mencionado periódico ucraniano agrega que: “El informe de la KGB dice que los restos de los soldados petrificados fueron trasladados a una institución de investigación secreta cerca de Moscú. Los especialistas suponen que una fuente de energía aún desconocida para los humanos cambió instantáneamente la estructura molecular de los organismos vivos de los soldados, transformándola en una sustancia similar a la piedra caliza”. El portavoz de la CIA que dio a conocer el citado informe agregó, sin embargo, que si esta es una información verdadera, “se trata de un hecho amenazante, ya que indicaría que los alienígenas poseen armas y tecnología que están más allá de los límites de nuestro entendimiento”. Hasta el momento no se ha explicado en el documento por qué la CIA redactó un informe sobre aquel incidente, usando como principal fuente a un periódico ucraniano. En todo caso, ha sido la única manera de enterarnos de aquel suceso, dado el hermetismo y el férreo control existente en la desaparecida Unión Soviética a la cual pertenecía Ucrania y que hoy poco a poco, van saliendo a la luz.