“La Tierra no es más que un diminuto punto pálido azul, un insignificante grano de arena dentro del vasto desierto cósmico” dijo Carl Sagan al ver imágenes de la Tierra desde el espacio y la ciencia no hace más que reafirmar su visión. En efecto, cada vez parece más improbable que nuestro planeta sea el único que alberga vida. Según un estudio que publicó este miércoles Monthly Notices del Royal Astronomical Society, los planetas situados en zonas habitables de estrellas de la Vía Láctea podrían contarse por miles de millones. Una cifra impensable de mundos que podrían atesorar agua líquida, e incluso organismos vivos. Como sabéis, la nave Kepler de la NASA tiene como misión encontrar exoplanetas, es decir, planetas que se encuentran fuera de nuestro Sistema Solar. Dentro del rango de visión de este buscador de nuevos mundos, los científicos ya han detectado miles. Sin embargo, la gran pregunta es: ¿cuántos de ellos podrían albergar vida? La respuesta la ha buscado un equipo internacional de investigadores del Australian National University y el Instituto Niels Bohr de Copenhague. Utilizando los hallazgos logrados hasta ahora por la nave Kepler, los astrofísicos han calculado el número probable de planetas que orbitan la zona habitable de las entre 100.000 y 400.000 millones de estrellas sólo en la Vía Láctea. Según sus estimaciones, cada uno de estos soles podría cobijar entre uno y tres planetas con condiciones para la vida. La misión Kepler está diseñada para detectar planetas que orbitan relativamente cerca de sus estrellas, por lo que muchos de estos mundos son demasiado calientes para sostener la vida. Por ello, para intentar averiguar si los sistemas planetarios descubiertos por la nave de la NASA tienen mundos en la zona habitable de su sol, los astrofísicos aplicaron una nueva versión de la llamada ley de Titius-Bode, un método formulado en torno a 1770 para calcular la posición de Urano, antes de que fuese descubierto por William Herschel en 1781. Esta ley astrofísica establece que existe una cierta relación entre los periodos orbitales de los planetas dentro de un sistema. Así, la diferencia proporcional entre el tiempo que tardan el primer y segundo planeta en orbitar a su estrella será la misma que entre el segundo y tercer mundo, y así sucesivamente. «Hemos decidido utilizar este método para calcular las posibles posiciones planetarias en 151 sistemas en los que Kepler había encontrado entre tres y seis planetas. Usando la ley de Titius-Bode,tratamos de predecir dónde podría haber planetas más alejados de su sol», explica Steffen Kjær Jacobsen, uno de los autores del estudio. De esta manera, llegaron a la conclusión de que los sistemas planetarios de nuestra galaxia contienen una media de dos mundos en la zona habitable de sus estrellas. «De acuerdo con las estadísticas que tenemos, buena parte de los planetas ubicados en la zona habitable serían mundos rocosos, como la Tierra, con lo cual allí podría existir agua líquida y vida», asegura el astrofísico. Por lo tanto, teniendo en cuenta la enorme cantidad de estrellas en la Vía Láctea, los astrofísicos concluyen que sólo en nuestra galaxia, podrían existir miles de millones de mundos con las condiciones adecuadas para el surgimiento de organismos extraterrestres. Películas como Interstellar han hecho soñar a la Humanidad con la idea de viajar a otros mundos donde la vida es posible, pero con nuestra tecnología actual la inmensa distancia entre la Tierra y cualquier mundo habitable fuera del Sistema Solar es insalvable. Sin embargo, Jacobsen es optimista: «Hay muchos obstáculos que superar antes de que se pueda llevar a cabo un viaje interestelar, pero la congelación criogénica de personas para los miles de años de viaje podría ser una solución para ese problema». En todo caso, como dijo Sagan, «nos guste o no, de momento la Tierra es donde tenemos que quedarnos».Sin embargo, cabe destacar que no necesariamente la vida en otros mundos debe de desarrollarse de acuerdo a nuestros parámetros – planetas que contengan agua y oxigeno – ya que pueda ser que estos elementos no les sean útiles. En ese caso, las probabilidades de encontrar vida alienígena serian infinitas ¿no os parece?
Newly Discovered Exoplanets Are Most Earth-Like... por GeoBeats