TIEMPOS DEL MUNDO

jueves, 6 de noviembre de 2025

LAS PICTOGRAFIAS DE BARRIER CANYON: ¿Un encuentro con seres de otros mundos?

De los miles de paneles de arte rupestre de los nativos americanos en el suroeste de los EE.UU., ninguno es más antiguo que las enigmáticas pictografías de Barrier Canyon que se encuentran en toda la meseta de Colorado. Concentrados a lo largo de los ríos, especialmente la confluencia de los ríos Green y Colorado, algunos pueden haber sido pintados hace 9.000 años. Muchos tienen al menos 5.000 años de antigüedad, desde pequeñas figuras de animales de cinco pulgadas hasta impresionantes formas humanas de dos metros y medio de altura, sin brazos ni piernas y ojos de insecto similares a los de los extraterrestres. Para encontrar estos paneles remotos, a menudo en las intersecciones de paredes de cañones de 700 a 800 pies, tiene que conducirse fuera de la carretera y luego caminar a lugares remotos para fotografiar las espectaculares pinturas de color rojo ocre. Las imágenes de figuras espeluznantes y alargadas con brazos y piernas acortados son difíciles de descifrar. De los antropomorfos, o figuras humanas, solo del 20 al 25 por ciento tienen ojos. La mayoría no tiene orejas ni narices y no hay forma de distinguir el género. Las serpientes se retuercen en sus manos o por encima de sus cabezas. Sin embargo, rodeando a estas feroces criaturas sin rostro hay delicadas colecciones de pájaros, patos, gansos, ciervos y, ocasionalmente, globos oculares flotantes con alas. La obra de arte es convincente. Las pinceladas y los pigmentos de pintura vibrantes hacen que las imágenes parezcan frescas y recién pintadas, sin embargo, una datación por carbono de un cabello incrustado de un pincel data del 6750 a.C. Las pinturas suelen ser de un color rojo sangre oscuro, probablemente hechas mezclando sangre y arcilla, y posiblemente usando orina como aglutinante. Las ubicaciones a menudo están a millas de la carretera pavimentada más cercana, en los recovecos remotos del Parque Nacional Canyonlands y en tierras de la Oficina de Administración de Tierras en Utah, Colorado, el norte de Arizona, el este de Nevada y partes de Wyoming. Los paneles más famosos son la Gran Galería, Buckhorn Wash, el Grupo del Espíritu Santo y el Panel de la Cosecha. El artista visual David Sucec, director del Proyecto de Estilo Barrier Canyon, y el fotógrafo Craig Law se unieron hace más de 25 años para inventariar este raro estilo de arte rupestre arcaico. Sucec recibió una beca de investigación de Humanidades de Utah para iniciar el proyecto. En ese momento, Sucec y Law pensaron que había alrededor de 160 sitios de arte de Barrier Canyon. Ahora han encontrado cerca de 450 pinturas al aire libre. Desde entonces, una exhibición de 24 de estas fotografías, con leyendas y texto en la pared, viaja durante varios años a lugares locales en todo Utah, con el apoyo de Utah Humanities en asociación con la División de Artes y Museos de Utah, lo que permite a las personas que nunca se aventuran en los cañones de la meseta de Colorado ver estas imágenes notables. Se sabe que la gente de Barrier Canyon no cultivaba. No crearon una arquitectura distintiva, pero el arte producido por estos cazadores-recolectores aturde a los observadores que doblan una esquina en un cañón profundo y ven estos enormes paneles por primera vez. La Gran Galería "del tamaño de una valla publicitaria" tiene 300 pies de ancho, con más de 80 figuras, muchas de ellas casi de tamaño natural. "Los primeros pintores expresionistas de Utah", los llama Sucec. Agrega: "El estilo Barrier Canyon se ha convertido en uno de los dos principales estilos de arte rupestre pintado del Período Arcaico en los Estados Unidos y posiblemente en todo el Nuevo Mundo". Sucec dice que este es "un estilo que duró, si las fechas son correctas, unos asombrosos siete mil años". Describe "técnicas virtuosas de creación de imágenes" y "figuras antropomórficas de tamaño natural a escala heroica como el Espíritu Santo". No hay representaciones violentas. No hay imágenes de conflictos humanos. En cambio, hay "asociaciones amistosas de imágenes de animales, pájaros, serpientes y plantas con figuras espirituales antropomórficas". La edad y el tamaño de las imágenes desafían nuestras perspectivas sobre el arte y la historia estadounidenses. Estas no son formas humanas como las reconoceríamos. Más bien, son figuras humanas con formas alargadas y espacios interiores rellenos de pintura o rayado cruzado, líneas onduladas, puntos, zigzags y serpientes. A diferencia de las antiguas galerías de cuevas de animales pintados de Europa, las imágenes de Barrier Canyon están compuestas por lo que Sucec ha categorizado como figuras espirituales, figuras ciudadanas y figuras compuestas. Las figuras espirituales son obvias y parecen de otro mundo. Las imágenes de los ciudadanos son figuras más pequeñas de tipo ayudante que parecen flotar alrededor de los espíritus. Las figuras compuestas son solo eso: una combinación de ambas. No hay leones saltadores ni uros atronadores; en cambio, estas son formas de vida con antenas y cuernos. Casi el 90 por ciento de las imágenes "son del tipo de figura espiritual". Las figuras compuestas presentan "combinaciones de partes del cuerpo de especies diferentes". La hierba de arroz india crece de las yemas de los dedos de una figura, mientras que los conejos juegan en su brazo ¿A quiénes representan estas imponentes y espeluznantes figuras de tamaño natural? La mayoría de ellos aparecen con ojos hundidos o faltantes, además de una frecuente ausencia de brazos y piernas, aunque hay otros de grandes ojos y enormes antenas que sobresalen de sus cabezas como insectos, además de largos dedos que le dan un aspecto sobrenatural y a su vez, atemorizante ¿Quisieron los nativos dejar grabados para la posteridad el encuentro que tuvieron con estos extraños seres? Es algo que nunca lo vamos a saber.

jueves, 30 de octubre de 2025

EL ORIGEN DE NOSFERATU: ¿Un vampiro más aterrador que Drácula?

“Desde su castillo en la región de Transilvania, el Conde Orlok está esperando a que caiga la noche para atraer a una nueva víctima inocente y saciar su sed de sangre”. Así podríamos empezar a resumir la historia de Nosferatu, uno de los vampiros más famosos de la historia del cine, inmortalizado por primera vez en 1922 por el director alemán Friedrich Wilhelm Murnau. El significado original de la palabra “Nosferatu” es difícil de determinar, aunque hay consenso en que adquirió popularidad gracias a la novela de 1897 “Drácula”, de Bram Stoker, quien usó como fuente literaria un término acuñado por la oradora y autora británica del siglo XIX, Emily Gerard. Esta autora introdujo la palabra “Nosferatu” en un artículo de una revista y en su diario de viaje “La tierra más allá del bosque”, comentando que “más decididamente malvado es el Nosferatu, o vampiro, en quien cada campesino rumano cree firmemente como en El Cielo y El Infierno que sólo es un rumor”. La palabra “Nosferatu” es una palabra rumana arcaica que se refiere a un vampiro, aunque algunos especialistas aseguran que ese término no corresponde a ninguna palabra existente identificada en el idioma rumano en ninguna fase histórica. Otros autores creen que la palabra “Nosferatu” pudo derivar de la palabra rumana “nesuferitu”, que significa “el ofensivo”. Una etimología alternativa es que el término pudo derivar originalmente de la palabra griega “nosophoros” (*νοσοφόρος) que significa “portador de enfermedad”. Curiosamente, la primera película de Nosferatu, dirigida por el director alemán Friedrich Wilhelm Murnau, enfatizó el tema de la enfermedad, al igual que sus dos secuelas, especialmente en la secuencia de la plaga de ratas que seguían al vampiro y llevaban la peste. La peste que sigue a Orlok es un recordatorio de las fragilidades humanas frente a fuerzas incontrolables, un eco de pandemias pasadas y presentes que vuelve el horror de Eggers extrañamente contemporáneo. Al respecto, un experto en historia y cultura popular sobre vampiros, comentó: “si tú preguntas, si haces una encuesta a pie de calle ahora mismo y dices: “Oye, ¿cómo es un vampiro?”, la gente te dirá que es un señor muy elegante, que probablemente vive en un castillo con muebles Luis XVI y cortinas muy elaboradas, que bebe vino, toca el laúd… pero el mito del vampiro está muy romantizado, viene desde mucho antes. El vampiro como tal, desde un punto de vista de histórico y de raciocinio y científico, diríamos que no existe, pero sí se puede documentar la creencia en vampiros. Se puede documentar sobre todo porque ha habido, desde el siglo V hasta el siglo XVI, arqueólogos que han encontrado tumbas con diferentes cuerpos enterrados o encadenados. En Polonia, en el 2022, se encontró una mujer enterrada con una hoz en el cuello; se han hallado cuerpos enterrados boca abajo con ladrillos en la boca o encadenados con una barra de hierro clavada en el pecho… Entonces sí que existía esta creencia de que podría resurgir un hombre de la tumba para alimentarse de la sangre de los vivos”. El experto agregó que “es verdad que se menciona la palabra ‘Nosferatu’ en la novela de Bram Stoker, y se cree que se podría haber inventado, porque Bram Stoker también decía que Drácula significaba ‘mal’ y ‘diabólico’ en rumano. Yo he preguntado a rumanos y me han dicho que no. Y surge el mito de Nosferatu, sobre todo porque Murnau, debido a que no consiguió los derechos de autor de la novela ‘Drácula’, creó una historia paralela”. “Así, el nombre de Drácula se cambió por el de conde Orlok; Jonathan Harker pasó a ser Hutter y la joven Mina Murray, objeto del deseo del chupasangre, fue convertida en Ellen. Es una historia muy parecida, pero le añadió más capas: no solo la luz del sol le afecta, ahora también va aportando enfermedades y plagas a su paso… Entonces, a partir de ahí se ha ido construyendo este Nosferatu que, curiosamente, para algunos ha eclipsado al propio Conde Drácula. Porque Drácula es quizás la versión pop, más elegante, mientras Nosferatu es la versión terrorífica, la versión que quizás es un poco más fiel a la destrucción y al mal que podían encarnar estos seres”, agrega. Con respecto a cómo se filmó la primera película de “Nosferatu” de 1922, hay que remitirse a los tiempos de la Primera Guerra Mundial. Cuando sirvió como soldado en el frente, Albin Grau, productor y diseñador de “Nosferatu”, se fascinó con el tema del vampirismo luego que en una aldea de Serbia escuchara la historia de un granjero que aseguraba que su padre se había convertido en vampiro. De acuerdo con un artículo de Grau en “Buhne und Film”, a un mes de la muerte del padre del granjero, ocurrieron muertes extrañas y algunas personas aseguraban que el fallecido rondaba por ahí. Para evitar rumores los lugareños exhumaron su ataúd y sorprendentemente lo encontraron vacío. Al poco tiempo encontraron a un hombre de aspecto repulsivo, con dientes largos y puntiagudos que le impedían cerrar la boca, identificándolo con el muerto, al que mataron a pedradas y con una estaca en el corazón y pesadas piedras sobre su pecho para que no saliera de su tumba, fue enterrado. Curiosamente, los asesinatos y extrañas desapariciones de personas terminaron súbitamente. Unos pocos años más tarde, Grau quiso adaptar la obra de Bram Stoker en una película para el cine. Pero como la viuda del escritor se negó a facilitar los derechos, Grau contrató al guionista Henrik Galeen para que escribiera una versión que eludiera los obstáculos legales, cambiando los nombres de los protagonistas. Para filmar la cinta creó una productora, Prana Films. Curiosamente, “Prana” es un término proveniente del sánscrito que se puede traducir como “fluido vital”, es decir, la sangre, y era muy utilizado por los teósofos de la época. El productor Albin Grau, quien fuera estudiante de ocultismo durante toda su vida y miembro de la oscura logia Fraternitas Saturni, bajo el mágico nombre de Maestro Pacitius, promocionó la película de terror de 1922 como una obra “erótico-ocultista-espiritista-metafísica” y la llenó de simbología esotérica. Un ejemplo concreto fue el contrato críptico que en la cinta intercambian el Conde Orlok y el personaje de Knock, que está escrito en enoquiano, con símbolos herméticos y alquímicos. Todo ese trasfondo oculto se reforzó con un tema que apareció en el notable filme “La Sombra del Vampiro” (2000), cuyo protagonista era el enigmático intérprete que encarnó al conde Orlok, el actor alemán Max Schreck, un intérprete que no se relacionó jamás con el resto del equipo y permaneció caracterizado como Nosferatu durante todo el rodaje, y de quien se decía que en realidad había sido… un vampiro. Su breve carrera en el cine y su muerte repentina, víctima de un infarto a los 56 años, sólo contribuyó a reforzar este mito que se niega a morir.

jueves, 23 de octubre de 2025

EL DRAGÓN DE BROSNO: Enigmas de lo desconocido

Escondido en la remota región de Tver, en el oeste de Rusia, se encuentra el lago Brosno, un lago profundo y helado que se encuentra aislado lejos de la civilización. El área es imponente y solo está escasamente habitada en los tiempos modernos, y su ambiente inquietante que pareciera ser de otro mundo, el cual se ve reforzado por las ruinas de un pueblo fantasma en sus costas, así como los restos de una iglesia ortodoxa ubicada bajo el agua en sus sombrías profundidades. Al contemplar este lugar, salvaje y azotado por el viento con sus ruinas irregulares, es fácil tener la sensación de que esta es una tierra abandonada llena de fantasmas y monstruos, y si, la leyenda y la tradición creen que el lago está habitado por un monstruo, según algunos relatos un auténtico dragón. En efecto, las historias de algo muy grande y amenazante que acecha en el lago Brosno se remontan al siglo XIII. Uno de los relatos tempranos más populares sobre el llamado Dragón de Brosno (también conocido como Brosnia), rodea a un ejército tártaro-mongol que se dirigía a Novgorod en el siglo XIII con la intención de conquistarla, liderado por el gobernante mongol y nieto del genocida Genghis Khan, llamado Batu Khan. Se dice que cuando sus tropas llegaron a las orillas del lago, se detuvieron para descansar y dar agua a sus caballos en la orilla. Según el relato, cuando los caballos y los hombres se reunieron junto al agua, un enorme dragón surgió de las profundidades para atacarlos, arrastrando caballos y hombres al agua para devorarlos. La criatura era tan formidable y feroz que el ejército invasor se batió en retirada, salvándose de esta forma Novgorod. Otro antiguo relato es el de un grupo de vikingos (Varegos como eran conocidos en Rusia) que se dispusieron a remar a través del lago para llegar a una isla, donde tenían la intención de enterrar el botín procedente de sus saqueos. Mientras los vikingos cruzaban sus aguas, el dragón atacó y destruyó el barco, matando a todos los que estaban a bordo. De hecho, esto se convertiría en un tema recurrente con respecto al Dragón de Brosno, que tenía la costumbre de destruir o volcar botes, hasta el punto de que los pescadores estaban aterrorizados durante mucho tiempo incluso de intentar salir al agua en dicho lugar. Algunas de las historias más dramáticas dicen que las fauces abiertas del dragón son tan masivas que literalmente puede succionar botes enteros y sus tripulaciones. Históricamente, el Dragón de Brosno se describiría como una criatura de gran tamaño, apareciendo como una “montaña de arena” que se eleva desde el lago y a menudo se dice que tiene cientos de pies de largo. Tales historias asombrosas continuaron hasta bien entrados los tiempos más modernos, con una descripción más concreta y algo menos fantástica de la bestia que se hizo clara. La mayoría de los informes describirían a la criatura como de alrededor de 20 pies de largo, con una cola larga, una cabeza de reptil, una boca de gran tamaño, parecida a un pez, y toda ella cubierta de escamas irregulares como la piel de un cocodrilo. Es más, algunos informes incluso mencionaron lo que parecía ser una especie de bioluminiscencia. Sin embargo, algunos de los informes todavía tenían el aire de una leyenda sobre ellos, describiendo cómo la criatura podía tragarse a personas enteras con sus fauces cavernosas, e incluso hay un caso de la Segunda Guerra Mundial cuando aparentemente se tragó un avión de combate alemán que se había estrellado en el lago. Posteriormente, la mayoría de los informes comenzaron a describir a la criatura como algo tímida y propensa a alejarse nadando si alguien se le acercaba. Aunque la lejanía del lago significa que actualmente los avistamientos de la criatura sean raros, ha habido algunos informes modernos bastante notables. En 1996, una familia procedente de Moscú estaba vacacionando en el lugar y cuando navegaban en el lago, su hijo pequeño comenzó a gritar y señalar por encima del agua. Los padres lograron ver algo grande y anómalo en la superficie, e incluso aparentemente le tomaron una foto, pero resultó ser demasiado borrosa para contar como evidencia significativa. En el 2002, la Asociación de Investigación Kosmopoisk lanzó una expedición al lago con la misión expresa de tratar de encontrar evidencias del Dragón de Brosno. Con este fin, hicieron barridos del lago utilizando un equipo avanzado de localización de eco y un sonar, y mientras lo hacían afirman haber encontrado un organismo muy grande de algún tipo en las profundidades, lo que los llevó a lanzar un dispositivo incendiario dentro del agua. Un miembro del equipo llamado Vadim Chernobrov explicaría lo sucedido: “El eco sonoro profundo registró una anomalía. Había una enorme masa gelatinosa del tamaño de un vagón de ferrocarril que se extendía cinco metros por encima del fondo. La masa permaneció inmóvil. Cuando el dispositivo explotó, la criatura comenzó a subir lentamente. Miramos el agua y estaba clara; no había nada parecido a un monstruo, sin embargo, algo inusual todavía se sentía en el agua del lago”. Según el equipo, lograron recuperar una extraña biomasa del agua, que se creía que había sido parte de algo vivo en algún momento y quizás era una parte de la criatura removida por la explosión. Se dice que se tomaron muestras de él, los cuales no coincidían con ninguna criatura conocida que habitara el lago. Obviamente, considerando que no se sabe nada más sobre estas pruebas, y no se hayan tomado fotografías, quizás sea mejor tomar estas afirmaciones con pinzas. Sin embargo, hasta el día de hoy ha habido informes de avistamientos esporádicos del Dragón de Brosno, y nos preguntamos qué podría ser. Existen muchas teorías al respecto, incluyendo que se trata de un pez de gran tamaño, identificaciones erróneas de bancos de olores o un animal como un alce, jabalí, o un oso. Otra versión afirma que hay un volcán en el fondo del lago que hace eyecciones a la superficie del agua de vez en cuando. Es bien sabido que hay varias fracturas en el fondo del lago, la profundidad y la dirección de estas no se pueden definir. No se descarta que el cráter de un volcán se pueda hallar dentro de una de tales fracturas. Pero este hipotético volcán aún no ha sido descubierto. Por otro lado, hay quienes aseguran que podrían tratarse de depósitos de gas que brotan del fondo. Sin embargo, la cantidad de sulfuro de hidrógeno debería ser considerable para poder volcar barcos. Asimismo, también existe la idea de que podría ser una especie no descubierta o un dinosaurio sobreviviente de algún tipo, similar al famoso Nessie escocés, pero no hay evidencia real que lo confirme. Lo que sea que exista o se produzca en las profundidades de ese remoto lago, ha permanecido en el misterio hasta el día de hoy, y mientras no surjan pruebas convincentes de lo que realmente alberga, permanecerá en las oscuras profundidades de la especulación.

jueves, 16 de octubre de 2025

LAS DIFERENCIAS SON SORPRENDENTES: “Las formas de vida extraterrestre no fueron creadas de manera similar a la nuestra”

En esta oportunidad el conocido astrofísico Avi Loeb - jefe del proyecto Galileo, director fundador de la Iniciativa Black Hole de la Universidad de Harvard, director del Instituto para la Teoría y la Computación del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian y autor del bestseller Extraterrestrial: The first sign of intelligent life beyond earth, así como de su nuevo libro Interstellar - nos da su opinión acerca de que las formas de vida extraterrestres no son iguales en el universo y que difieren unos de otros, lo cual os ofrecemos como ya es habitual, traducido y entrecomillado ¿vale?: “Considerando los miles de millones de exoplanetas similares a la Tierra que giran alrededor de una estrella en la Vía Láctea, los humanos probablemente no estamos en la cima de la cadena alimentaria galáctica. En efecto, necesitamos desesperadamente una dosis de modestia cósmica. La respuesta a la pregunta de Enrico Fermi: "¿ dónde están los extraterrestres? " es: "para encontrarlos, hay que ser proactivo y buscar objetos interestelares de origen tecnológico". La respuesta a la afirmación de Elon Musk " probablemente estemos solos " es: "no seas tan presuntuoso, ya que los empresarios espaciales que son mejores que tú probablemente vivieron en la Vía Láctea durante miles de millones de años antes de que nacieras". Es nuestra obligación científica encontrar las reliquias de estos empresarios espaciales en lugar de alardear de nuestra importancia cósmica sin invertir recursos en la búsqueda de productos tecnológicos extraterrestres. Si existen o no depende de lo que nos digamos unos a otros, por la misma razón que la Tierra giró alrededor del Sol 4.540 millones de veces antes de que el Vaticano condenara a Nicolás Copérnico por sugerir un sistema solar heliocéntrico. La próxima revolución copernicana implicaría la comprensión de que la humanidad tiene hermanos en la familia de las civilizaciones tecnológicas. Estos hermanos podrían haber existido durante miles de millones de años antes de que los humanos emergieran en la Tierra. La mayoría de ellos no sólo vivieron, sino que también murieron hace miles de millones de años. Debemos reconocer además que no estamos en el centro del escenario cósmico y llegamos tarde a la escena cósmica. El sentido común sugiere que no somos actores centrales en la obra espacial. Si la humanidad muriera por heridas autoinfligidas - una guerra nuclear, por ejemplo - la actividad geológica borraría todas las cicatrices industriales de la humanidad en la superficie terrestre en millones de años. Pero cuando la Tierra pierda sus reservas de agua y se convierta en un desierto como Marte dentro de mil millones de años, como resultado del aumento del brillo del Sol, ningún visitante del sistema solar se daría cuenta siquiera que la vida se desarrolló alguna vez en la Tierra. Mil millones de años equivalen a solo el 7% de la historia cósmica. En el esquema cósmico de las cosas, nadie sería consciente de la pérdida de la humanidad... a menos que enviemos reliquias tecnológicas que lleven a nuestros descendientes de IA al espacio interestelar. Estas reliquias tecnológicas serán las únicas pistas que la humanidad podría dejar para los futuros arqueólogos espaciales. Por reciprocidad, la búsqueda de reliquias similares es la mejor manera de comprender que otras civilizaciones nos precedieron por miles de millones de años. ¿Cómo nos percibirían los demás si nos vigilaran? Para los alienígenas, la humanidad podría parecerse a un niño pequeño en el escenario cósmico. Tonto y centrado en sí mismo, sin darse cuenta de adultos experimentados con cerebros más grandes en la habitación contigua observan sus pasos. Como preparación para una entrevista de 4 horas, me pidieron que viera la película " 2001: A Space Odyssey", creada por Stanley Kubrick y Arthur C. Clarke, en la que la humanidad es vista como un niño pequeño con monolitos alienígenas que sirven como monitores en su habitación infantil. El creador de estos monolitos aparece a imagen de Dios, con la apariencia de un adulto en la habitación contigua. Esta notable película imaginó la creación de sistemas de inteligencia artificial que podrían tener mayor afinidad con las tecnologías alienígenas que con los humanos, ya que están hechos de chips de silicio y no de carne y hueso. Debemos imaginar posibles realidades para buscarlas. Si seguimos a los expertos en cometas con la suposición predeterminada de que todos los objetos interestelares son cometas, podríamos caer en la trampa de insistir en que las naves espaciales son "cometas oscuros" porque no muestran gas ni polvo visibles a su alrededor. Esto no es una preocupación hipotética. Actualmente, los expertos en cometas argumentan firmemente que el primer objeto interestelar, 1I/Oumuamua, fue un cometa oscuro y las interpretaciones alternativas de sus anomalías no resueltas son ridiculizadas mediante ataques personales contra quienes se atreven a imaginar algo diferente. Para no perder de vista las pistas que ofrecen las anomalías de objetos tecnológicos en relación con las rocas espaciales, debemos imaginar las tecnologías extraterrestres como una posibilidad. Nuestra realidad física dentro de la Vía Láctea podría ser más imaginativa que la nuestra, ya que nuestro conjunto de datos de entrenamiento se limita a la Tierra y hay mucho más espacio en el espacio exterior. La mayoría de los astrobiólogos están obsesionados con la búsqueda de microbios y la vida tal como la conocemos. Si, en cambio, cubriéramos nuestras apuestas e invirtiéramos fondos y esfuerzos de investigación similares en la búsqueda de vida inteligente, la recompensa podría ser mayor. El descubrimiento de nuevas tecnologías inimaginables inspiraría a la humanidad a cambiar sus prioridades. En lugar de invertir 2,4 billones de dólares al año en presupuestos militares a nivel mundial para matarse unos a otros, podríamos optar por invertir una cantidad similar en la exploración espacial. Si queremos ser recordados dentro de miles de millones de años, debemos aventurarnos en el espacio interestelar. Cualquier reliquia espacial que dejemos servirá como testimonio de que el espíritu humano no puede ser exterminado tan fácilmente como la vida en la superficie de planetas como la Tierra o Marte. Las formas de vida extraterrestres no fueron creadas iguales. Quienes fueron lo suficientemente inteligentes como para dejar reliquias en el espacio interestelar se elevaron a la categoría de actores principales en la obra cósmica. Podrían ser recordados por los arqueólogos espaciales. Nuestros hermanos alienígenas podrían tener un aspecto diferente, incluyendo en formas de vida que desconocemos. Podría ser más fácil identificar objetos interestelares de origen tecnológico que identificar las sutiles huellas químicas de microbios familiares en atmósferas de exoplanetas. Estas reliquias tecnológicas podrían aparecer como objetos interestelares anómalos en el sistema solar interior, como el último visitante 3I/ATLAS con sus numerosas anomalías. Por ello, es una obligación de los científicos sentirse intrigados por los objetos interestelares que parecen inusualmente grandes y siguen trayectorias ajustadas para encontrarse con planetas del sistema solar, como parece ser el caso de 3I/ATLAS. ¿Aprovechará 3I/ATLAS la asistencia gravitacional del Sol en su perihelio este 29 de octubre para realizar una maniobra de Oberth. De no ser así, 3I/ATLAS llegará a 54 millones de kilómetros de Júpiter el 16 de marzo del 2026. Asimismo, ayer también conocí en una conferencia del MIT a Scott Bolton, quien se desempeña como investigador principal de la nave espacial Juno cerca de Júpiter, que tendrá una oportunidad de explorar 3I/ATLAS desde cerca. Scott me informó que Juno usará su antena dipolar Waves y su bobina magnética para buscar emisiones de radio de 3I/ATLAS en el rango de frecuencia de 50 hercios a 40 megahercios. Dada la coincidencia entre la dirección de llegada de 3I/ATLAS al Sistema Solar y la dirección de la enigmática señal ‘¡Waoo!’ detectada en 1977, valdría la pena buscar cualquier emisión de radio anómala de 3I/ATLAS. Como civilización tecnológica primitiva que somos, debemos estudiar de todas las formas posibles la naturaleza de los objetos que ingresan a nuestra habitación desde el mundo exterior” puntualizó.

jueves, 9 de octubre de 2025

OCULTOS A GRAN PROFUNDIDAD: Congresista de EE.UU. insiste acerca de la existencia de bases submarinas de OVNIS en las Bahamas

Los alienígenas podrían estar escondidos en "cinco o seis" bases submarinas frente a las Bahamas, afirmó un alto político de Estados Unidos. En efecto, el congresista Tim Burchett - miembro del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes que supervisa los avistamientos de ovnis denunciados - dijo que "entidades" extraterrestres avanzadas pueden estar escondidos en las profundidades de los océanos no monitoreadas del planeta durante generaciones, informa esta semana The Daily Star. Añadió que ha habido frecuentes avistamientos de embarcaciones no identificadas alrededor de cinco o seis áreas específicas de aguas profundas frente a la costa de Estados Unidos. Burchett está convencido de que entidades desconocidas viven bajo el agua dado lo poco que se sabe sobre el océano en comparación con la superficie de la Luna. “Conocemos más del satélite que de nuestro propio planeta” asevero. Al respecto, dijo que personal de la Marina de Estados Unidos ha informado sobre la persecución de naves submarinas que se mueven a velocidades extraordinarias y superan con creces las capacidades de la tecnología militar actual. En un clip publicado en X, el político dijo: “Tenemos personal naval diciéndome que tenemos estos avistamientos, estas naves submarinas que están persiguiendo y que van a cientos de kilómetros por hora, y lo mejor que tenemos es algo que va tal vez un poco menos de 60 kilómetros por hora. Burchett ha dicho anteriormente que cree que el gobierno de Estados Unidos está encubriendo la existencia de extraterrestres. En el 2023, le dijo a Newsweek que las autoridades habían recuperado un OVNI (también conocida como UAP o fenómeno aéreo no identificado) y unos posibles "seres", apunta The Daily Star. Burchett dijo que los funcionarios estadounidenses habían intentado realizar ingeniería inversa de la nave para comprender mejor la avanzada tecnología extraterrestre. Ha afirmado además que el gobierno de Estados Unidos ha recuperado OVNIS a lo largo de los años, pero se ha mostrado reacio a compartir detalles con el público. “Es hora que se sepa la verdad” puntualizó. En años recientes, el interés por este tipo de fenómenos creció. Varios avistamientos de OVNIS fueron reportados y discutidos públicamente en el Congreso estadounidense, y algunos legisladores solicitaron investigaciones más profundas al respecto. En marzo del 2024, el Pentágono publicó un informe en el que afirmó que “no tenía pruebas de la existencia de OVNIS y que muchos avistamientos sospechosos eran simples globos meteorológicos, aviones espía, satélites y otros objetos normales”. Sin embargo, las afirmaciones sobre encuentros con extraterrestres o naves de tecnologías avanzadas continúan siendo objeto de debate y controversia.