Una noticia proveniente de los Estados Unidos afirma que el Diablo podría tener su estatua pública en Oklahoma, luego que los conservadores abrieran la puerta a este tipo de conmemoraciones al colocar un monumento a los Diez Mandamientos en la escalinata de la legislatura estatal, informó este lunes la CBS. En efecto, el foro legislativo, controlado por los republicanos en este estado extremadamente conservador y donde la religión está presente en todas las actividades, autorizó en el 2009 el monumento a los Diez Mandamientos, que se colocó en terrenos del Capitolio el año pasado a pesar de críticas de expertos jurídicos, quienes cuestionaron su constitucionalidad y originó que la Asociación Nacional para la Defensa de los Derechos Civiles (ACLU) presente una demanda para que eliminen dicho monumento. Sin embargo, El Templo Satánico – una organización con sede en Nueva York – aprovechó la oportunidad y notificó a la Comisión de Preservación del Capitolio estatal que desea donar un monumento a Satanás, cuya maqueta acaba de ser presentada esta semana, dijo Lucien Greaves, portavoz del Templo. "Creemos que todos los monumentos deben tener buen gusto y respetar las normas de la comunidad", escribió Greaves en una carta a funcionarios estatales. "El monumento que proponemos, como homenaje al Satán histórico y literario, respetará estas directrices". Según los autores del polémico proyecto, se trata de una estatua de más de dos metros, el cual deberá reemplazar a un monumento dedicado a los Diez Mandamientos de la Biblia, que se instaló cerca del Capitolio en el 2012. La maqueta del monumento representa a Satanás como Baphomet, criatura con cabeza de macho cabrío, cuerpo femenino, pezuñas hendidas, una vela en la cabeza y un par de alas. Satanás aparece sentado en un trono con una estrella de cinco puntas rodeado de niños sonrientes. Greaves agregó que espera que el monumento, si los funcionarios de Oklahoma lo aprueban, costaría unos 20.000 dólares, de lo cual el grupo ya ha recaudado casi la mitad."Tenemos la intención de seguir adelante de una manera u otra", afirmó el portavoz. "Uno no ve muchos templos satánicos por ahí, pero cuando se nos abre la puerta a los espacios públicos, nos van a ver` puntualizó. Sin embargo, dicho proyecto ha originado un gran rechazo de diversos legisladores quienes lo califican de un insulto a la inteligencia: “No veo el satanismo como una religión, y por lo tanto no tienen ningún lugar en el Capitolio estatal", aseveró el republicano Earl Sears. Hace poco, Cleveland desestimó la noción de levantar un monumento a Satanás en el Capitolio, calificando a los Satanistas de locos. Como sabéis, en la religión cristiana, es el principal enemigo de Dios y que - originalmente llamado Lucifer -fue uno de los ángeles que custodiaba su trono, pero que al hacerse malvado fue expulsado del Cielo y una vez llegado al infierno cambió su nombre por el de Satanás que significa adversario. Según el Apocalipsis, al final de los tiempos será vencido y su destino final será el lago de fuego. Venga ya, dudo mucho que los Satanistas logren su cometido, pero me parece absurdo levantar un monumento a tan diabólica criatura. ¿No lo creen ustedes?