Como sabéis, las leyes físicas de nuestro Universo son idóneas para la vida que conocemos. Pero si los números, parámetros y constantes, que están detrás de estas leyes fueran ligeramente distintos, probablemente no estaríamos aquí. Bastaría con que la carga de los protones no fuera la que es, o que el equilibrio entre gravedad y energía oscura no fueran como los conocemos. ¿Por qué son las cosas exactamente como son? La respuesta es más bien filosófica, pero algunos investigadores han propuesto alguna vez la posibilidad de que nuestro Universo sea solo uno entre infinitos universos, cada uno gobernado por unas leyes y parámetros propios. Por eso, es posible que las galaxias y las estrellas solo puedan existir en algunos universos con leyes “adecuadas”, o bien que en otros existan realidades que no podemos ni imaginar. Es la intrigante teoría del multiverso. Dos artículos publicados recientemente en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society analizan qué ocurriría en universos paralelos con mayores proporciones de energía oscura que el nuestro. A través de masivas simulaciones por ordenador, los investigadores han creado universos con distintos parámetros iniciales y así han descubierto que las condiciones necesarias para la aparición de galaxias y de lugares donde puede aparecer la vida no son tan exclusivas como se suele pensar, lo que tiene importantes implicaciones para la teoría del multiverso. “Nuestras simulaciones mostraron que la expansión acelerada del Universo impulsada por la energía oscura apenas tiene impacto en el nacimiento de las estrellas, y por ende en los lugares donde pude nacer la vida”, ha dicho en un comunicado Pascal Elahi, coautor de estudio e investigador en la Universidad de Australia Occidental. “Incluso aumentar la cantidad de energía oscura cientos de veces no sería suficiente para crear un universo muerto”. Los autores han calculado que universos con hasta 300 veces más energía oscura que el nuestro serían compatibles con la aparición de galaxias y, por tanto, de vida. También han averiguado que nuestro universo tiene poca energía oscura en comparación con lo que sería “habitual” si realmente existieran los universos paralelos. Esto tiene la importante implicación de que esta teoría del multiverso ya no podría explicar por qué en el nuestro hay tan poca energía oscura. La energía oscura es uno de los mayores enigmas de la ciencia. Nadie sabe qué es, ni si realmente existe. Lo que sí se sabe es que la gravedad pugna por mantener unida la materia y que permitió la aparición de estrellas y galaxias durante la infancia del Universo. También se sabe que, a pesar de la gravedad, el Universo se está expandiendo y que, además, lo hace cada vez más rápido. ¿”Quién” está detrás de esto? ¿Hemos pasado por alto algo muy importante o es que realmente existe una misteriosa fuerza repulsiva que hace que las galaxias se alejen y que lo haga más rápido cuanto más lejos estén? La respuesta más ampliamente aceptada es la energía oscura: de hecho, este fenómeno constituye el 70 por ciento de toda la masa y energía de nuestro Universo. Algunos creen que este misterioso fenómeno es una propiedad del espacio-tiempo o una fuerza totalmente desconocida. Aunque su naturaleza es un enigma, se suele considerar que contribuye al equilibrio en nuestro Universo. Si la energía oscura fuera mucho más abundante de lo que es, el espacio se habría expandido demasiado, en la infancia del Cosmos, como para permitir la aparición de galaxias. Si fuera mucho menos abundante, las galaxias habrían colapsado sobre sí mismas antes de nacer. Pero, si resulta que las galaxias pueden desarrollarse en universos con 300 veces más energía oscura, ¿cómo se explica que en nuestro Universo haya la cantidad que hay de esta “sustancia”? “El multiverso explica el valor observado de energía oscura como una lotería; como si hubiéramos tenido suerte y viviéramos en el Universo que forma bonitas galaxias y que permite la vida tal como conocemos”, ha dicho en un comunicado Luke Barnes, coautor del estudio e investigador en la Universidad Occidental de Sidney. Pero los cálculos muestran que lo esperable sería que nuestro universo tuviera 50 veces más energía oscura. “Nuestro trabajo muestra que quizás tenemos demasiada suerte, por así decirlo. Nuestro Universo es más especial de lo que necesita para albergar vida. Esto es un problema para la teoría del multiverso; el misterio sigue abierto”, añade. Quizás, sugieren, la escasa cantidad de energía oscura de nuestro Universo puede ser explicada por una ley de la naturaleza aún no descubierta. “Creo que deberíamos buscar una nueva ley física para explicar esta extraña propiedad de nuestro Universo, porque lo cierto es que la teoría del multiverso hace poco para calmar nuestra intranquilidad”, ha dicho en un comunicado Richard Bower, coautor del estudio e investigador en la Universidad de Durham (Reino Unido). Dicha ley podría explicar qué rango de proporciones de energía oscura son, teóricamente, compatibles con la aparición de galaxias. Esta fue precisamente la finalidad de la investigación. En ella, los científicos hicieron simulaciones por ordenador para el nacimiento, vida y muerte de universos hipotéticos con distintas cantidades de energía oscura. Para ello recurrieron a EAGLE, de “Evolution and Assembly of GaLaxies and their Environments”, un proyecto capaz de hacer realistas simulaciones sobre la evolución del Universo. No parece muy probable que se vaya a poder comprobar la hipótesis de que ahí afuera hay otros universos. Sin embargo, lo inquietante es que es perfectamente posible que en un universo paralelo exista otra civilización alienígena tratando de comprender la realidad, como lo hacemos nosotros. Más interesante es todavía la elevada probabilidad de que en nuestro propio universo existan múltiples civilizaciones, viviendo en alguna de las miles de millones de galaxias vecinas o en alguna de las miles de millones estrellas de la Vía Láctea.