TIEMPOS DEL MUNDO

jueves, 22 de enero de 2015

NUEVAS EVIDENCIAS CONFIRMARIAN SU EXISTENCIA: Exploradores rusos captan extrañas imágenes de un Yeti

El debate sobre la existencia del Hombre de las Nieves o Yeti nos acompaña desde hace muchísimos años. Es frecuente que alguien afirme haber visto uno caminando por algún bosque, o que se encuentren pruebas que apunten que la criatura bien podría ser algo más que una leyenda. La última de ellas nos llega en forma de vídeo desde Rusia, donde unos exploradores han logrado filmar durante unos segundos lo que, según dicen, parece ser un Yeti en su hábitat natural. Encontramos esta impactante historia en “The Daily Express”, donde se ofrecen más detalles sobre las circunstancias que condujeron al asombroso descubrimiento. No fue una casualidad: como tantos otros, los excursionistas de Adygueisk se sentían intrigados sobre la posible existencia del Yeti. Así que, bien abrigados y cámara en mano, decidieron salir a recorrer varios lugares en los que algunos testigos aseguraban haber avistado uno de estos monstruos. El resultado de su búsqueda fue un vídeo que circula profusamente en la Red. Aunque ellos han sido los primeros en obtener una prueba gráfica, otros vecinos de la zona habían declarado anteriormente que un Yeti rondaba los alrededores. «Vi una criatura grande, parecida a un oso... pero no era un oso. Era algo grande y peludo», explica una mujer. Además, un hombre afirma haber analizado una huella gigantesca hallada en el mismo sitio. «La marca tenía unos cinco o seis centímetros de profundidad, no podía ser de un pie humano. Hemos estimado que quien la haya dejado debería pesar unos 200 kilos», sostiene. Sea como sea, el interrogante vuelve a estar abierto. ¿Se ha captado realmente un Hombre de las Nieves o no es más que un nuevo truco para alimentar el mito? Los escépticos señalan que se trata de una estrategia para atraer turistas. En cambio, quienes creen en su existencia exigen profundizar en las investigaciones para llegar a una conclusión de una vez por todas. A fin de cuentas, de existir verdaderamente, un Yeti podría esconderse con facilidad en lugares inhóspitos para el ser humano de los muchos que existen en Siberia Así, no hace muchos años, se encontraron algunos indicios que refuerzan la tesis de los creyentes. Además de huellas, los científicos recogieron pelos e incluso llegaron hasta una cueva que podría haber sido la residencia de un Yeti. De momento, no nos queda más remedio que seguir esperando alguna prueba más concluyente de que no sea más que una leyenda.