TIEMPOS DEL MUNDO

jueves, 21 de abril de 2016

ALESHENKA: Aquella criatura alienígena momificada encontrada en Rusia

Una noticia que nos trae esta semana The Moscow Times trata sobre un extraño suceso acaecido en Rusia en 1996. Sucede que en agosto de ese año, en el pueblo de Kaolinovy - a pocos kilómetros de la ciudad de Kyshtym - fue encontrada de manera casual una pequeña criatura de origen posiblemente extraterrestre del cual se dice que todavía se encontraba con vida, por una anciana llamada Tamara Vasilievna Prosvirina, la cual era una enferma mental y quien lo bautizo como Aleshenka (un diminutivo ruso de Alexei) . Al día siguiente, todos los vecinos ya estaban al tanto de su llegada, ya que la anciana estaba diciendo a todos que había tenido un hijo al que había llamado Aleshenka. Al principio nadie le creyó, ya que pensaban que era sólo un producto de su locura, pero al insistir tanto en el tema - aunque nunca se los mostró y jamás escucharon el llanto de un niño - decidieron llamar al hospital psiquiátrico para que sea internada porque la consideraron peligrosa. Es así que a los pocos días llego una ambulancia y a la fuerza se la llevaron de allí. A pesar de que Vasilievna trató de explicarles que ella había dejado “a su hijo sólo en su casa y sin que nadie lo cuidase”, los médicos no tomaron en serio sus palabras, y por el contrario la encerraron bajo llave en una habitación del hospital y se supone que al no recibir atención, Aleshenka murió de hambre y sed, por lo que su cuerpo comenzó a secarse. Vladimir Nurdinov, un vecino de la anciana, intrigado por sus palabras, ingresó a la casa de Vasilievna para ver si era cierto lo que decía lo de su hijo cuando se la llevaban en la ambulancia y sólo encontró una momia seca en la cama. Sin saber qué hacer con él, se lo llevó a su casa y lo lavó con alcohol, dejando que se seque al sol, lo cual ayudó a que adquiera un aspecto “momificado”. Como podéis imaginar, la noticia sobre ese enigmático descubrimiento no tardo en darse a conocer y muchos llegaron a su casa para tomar fotografías de aquella criatura. El aspecto inusual de aquel misterioso ser de inmediato instaló el debate sobre su posible origen extraterrestre. Aleshenka, tenía unos 25 cm. de longitud, era de color gris y su cabeza desprovista de pelos tenía una serie de manchas oscuras. Sus ojos eran grandes, y poseía una pequeña nariz debajo de la cavidad ocular. La conmoción causada por tal descubrimiento, obligo a Nurdinov a entregarlo a la policía local. En cuanto a Prosvirina, ella murió en 1999 atropellada por un automóvil en extrañas circunstancias al intentar escapar del hospital “para alimentar a su hijo” según sus últimas palabras antes de fallecer. Sobre el destino de Aleshenka, nada se sabe en la actualidad ya que desapareció sin dejar rastro. Un equipo de la televisión japonesa que había llegado al lugar para hacer un documental, ofreció una recompensa de 200.000 dólares para obtener información sobre el paradero de la criatura robada. Sin embargo, sus intentos para localizar el cuerpo fueron en vano. Si bien un ufólogo local - con afán de figuración - afirmó que el cadáver “fue llevado en un OVNI por miembros de la misma especie de Aleshenka”, otros sostienen que fue comprado a la policía (que custodiaba el cuerpo) por un rico coleccionista de curiosidades. Un médico del hospital local que supuestamente había visto el cadáver alegó que correspondía al feto de “un ser humano normal de alrededor de 20-25 semanas, nacido prematuramente y que podría haber vivido durante varias horas, pero no varias semanas”, contrariamente a las afirmaciones de Prosvirina. Según los expertos del Instituto Vavilov de Genética General de Moscú, el análisis de ADN de la ropa en que Aleshenka estaba envuelta, “no reveló ninguna evidencia de que fuese de origen extraterrestre”. El 15 de abril del 2004, los científicos hicieron una declaración oficial en la que afirmaron que la “Criatura de Kyshtym”- como lo llamaron - era un bebé prematuro humano femenino, con graves deformidades. Pero la historia no termina aquí, ya que cosas extrañas comenzaron a suceder a quienes habían tenido contacto previo con la criatura o interés en investigar su origen. La primera de ellas fue la misma anciana quien murió atropellada cuando trataba de huir del hospital psiquiátrico, sólo unos días antes de que un equipo de investigadores llegara de la ciudad de Moscú para estudiar el caso e interrogarla exhaustivamente. Otra de sus víctimas fue el académico Marcos Milkhiker mientras realizaba en el lugar su propia investigación. Milkhiker cayó gravemente enfermo poco después de regresar a Moscú y murió de un repentino ataque al corazón en el hospital, llevándose sus secretos a la tumba. El siguiente de la lista fue el doctor Vadim Chernobrov, quien previamente había desmentido el informe “oficial” asegurando que si se había encontrado ADN extraterrestre en las pruebas realizadas a ese trozo de tela utilizado por la anciana para envolver a la diminuta criatura. Sin embargo, de un día para otro, Chernobrov quedo paralizado inexplicablemente de la cintura para abajo, perdiendo el habla. Los médicos no pudieron explicar la causa de su enfermedad y murió a los pocos días. Muchos afirman desde entonces que había caído una “maldición” a quienes buscaban encontrar los restos de aquel extraño ser y dejaron de hacerlo. Han pasado veinte años de tal suceso y aún no sabemos si Aleshenka era una criatura extraterrestre o no. Una cosa es cierta, no se trato de un mito porque aun existen muchos testigos que vieron el cadáver, como el mayor (retirado) Vladimir Bendlin, un ex investigador del departamento de policía de Kyshtym. Sólo quedó para la posteridad las fotografías que lograron tomar al cadáver momificado y en ellas se puede apreciar claramente por la forma de su cabeza que era de origen “no humano”.