A propósito del injustificado bombardeo con misiles perpetrado por los EE.UU. contra Siria por obra de un demente que se cree juez y policía del mundo, en los últimos días está circulado insistentemente en las redes un versículo del profeta Isaías que inquieta a más de uno:. “Todo el reino de Siria dejara de existir, al igual que la ciudad de Damasco; además las ciudades del norte, que son el orgullo de Israel, se quedarán sin murallas, Yo soy el Dios todopoderoso y juro que así será. Damasco dejará de ser ciudad, y será montón de ruinas. Las ciudades de Aroer están desamparadas, se convertirán en pastizales; dormirán allí, y no habrá quien los espante”, dice Isaías, capítulo 17, versículo 1, en la Biblia. Como sabéis, Damasco es la actual capital de Siria y es una de las ciudades habitadas más antiguas del mundo. El actual conflicto en esa zona del mundo ha despertado la atención mundial, especialmente cuando Rusia e Irán han señalado que responderán con la fuerza si EE.UU. vuelve a atacar a Siria. Pero ¿Podría el versículo de Isaías ser una profecía del fin del mundo? El pastor Gary Cristofaro, de Melbourne, Australia, dijo que “la situación en Siria en lo que se refiere a las Escrituras podría ser algo que estamos presenciando, pero debemos ser cautelosos” aseveró. La relación entre el conflicto en Siria y las profecías de la Biblia no es nueva; investigadores y estudiosos se han pronunciado al respecto en los últimos años. El doctor Floyd Elmore, profesor de Teología en el Seminario Evangélico del Sur de Matthews, en Carolina del Norte, señaló que “dado que el Señor dijo que nadie sabe el día o la hora en que Él vendría, realmente no creo que nadie pueda decir con absoluta certeza que estos eventos específicos van a conducir a las catástrofes del fin de los tiempos”, declaró al Christian Post en 2013. En ese momento, la administración del Criminal de Guerra y musulmán encubierto Barack Hussein Obama analizaba la posibilidad de atacar Siria luego de un operativo de bandera falsa organizado por el Pentágono para acusar de ello a Damasco, un escenario muy parecido al que estamos viviendo 3 años después. En esa ocasión, una gran parte de los estadounidenses se sintió realmente asustada con la perspectiva de involucrarse en un nuevo conflicto bélico y como era de esperar, la venta de libros que tratan el tema de las profecías bíblicas sobre el Apocalipsis - con autores como Perry Stone, John Hagee y Joel Rosenberg - aumentó considerablemente, reportó el diario 'USA Today'. Por el contrario, el doctor Robert Mulholland, exprofesor del Nuevo Testamento en el Seminario Teológico de Asbury, en Kentucky, negó entonces cualquier conexión entre el conflicto sirio y la teoría bíblica. “Lo mismo se predijo durante el primer y el segundo conflicto en Irak (por no hablar de los diversos conflictos entre los sionistas y sus vecinos)”, advirtió. “Por supuesto, la larga y compleja relación de Israel con Damasco durante todo el período del Antiguo Testamento proporciona una gran riqueza para la especulación”, dijo al Christian Post. Lo cierto es que la mirada del mundo está puesta no solamente sobre ese punto convulso de Oriente Medio - donde el psicópata ha amenazado con volver a bombardear Siria - sino también en la península coreana, adonde se dirige la flota estadounidense para imponer una ‘solución unilateral’ a la amenaza que representa Corea del Norte. Esto significa un bombardeo ‘preventivo’ a sus instalaciones nucleares, lo cual como es obvio, no quedaría sin respuesta por parte del dictador comunista que es tan loco como Trump, el cual con sus demenciales acciones, lo único que se va a conseguir será el estallido de una conflagración mundial y el fin de la humanidad, tal como lo anuncian las profecías ¿Llego la hora de su cumplimiento?