Como sabéis, el descubrimiento de exoplanetas potencialmente habitables se ha vuelto últimamente una práctica habitual gracias a los telescopios espaciales que realizan este tipo de hallazgos, lo que abre la posibilidad de encontrar vida extraterrestre y confirmar las teorías de que no estamos solos en el universo. Es mas, muchas son las personas que están firmemente convencidas de que están habitadas por extrañas formas de vida y se han preguntan porqué los diferentes gobiernos, ocultan toda información acerca de ellos y no admiten su existencia, ya que de hacerlo cambiarían entre ellas, las creencias religiosas de todo el mundo. Y es que según los teóricos de la conspiración, una de esas misteriosas informaciones celosamente guardadas, indicaría que el ‘nacimiento’ de Jesús seria una leyenda de origen extraterrestre. Y es aquí donde comienza una de las teorías más controvertidas de toda la historia de la humanidad. Según algunos expertos, el ‘nacimiento’ de Jesús podría haber sido producto de la intervención de una avanzada civilización y que el llamado ‘hijo de Dios’ seria en realidad un híbrido extraterrestre. Una hipótesis que cobra fuerza, ya que se cree que cuando los ángeles visitaron a María en lo que ella los percibió como un sueño, lo que sucedió realmente es que se trataba de una visita de seres alienígenas, entre ellos el famoso “Ángel Gabriel”. Estos seres la inseminaron artificialmente con un esperma genéticamente modificado, por lo que cuando María ‘dio a luz’ a Jesús, uno de los primeros híbridos mitad humano, mitad extraterrestre. Esto sería un breve resumen de uno de los enigmas más grandes de la historia. Pero si analizamos más de cerca del ‘nacimiento’ de Jesús, de los cuatro evangelios que mencionan su vida, sólo Mateo y Lucas se refieren al milagro biológico de una mujer virgen que queda embarazada por ‘un acto de Dios’ y da a luz a un hijo. Fue a través de estas dos versiones, que Jesús fue elevado a la categoría de los dioses salvadores. Otra de las influencias extraterrestres que rodearon el ‘nacimiento’ de Jesús fue la enigmática Estrella de Belén, que guió a los Reyes Magos llegados de Oriente y que curiosamente se ‘detuvo’ exactamente sobre el lugar donde acaeció el hecho, ‘iluminando’ el pesebre con un rayo de luz - algo que ninguna estrella puede hacer - por lo que se deduce que en realidad se trataba de un OVNI. Otro hecho que llama la atención a los especialistas es que entre el ‘nacimiento’ de Jesús y sus obras y milagros, que tuvieron lugar en torno a la edad de treinta años, casi no existe documentación. Esto puede ser considerado como un largo periodo llamado el “tiempo perdido”. Los expertos sugieren que el Jesús híbrido pudo haber sido instruido, entrenado y preparado por su padre extraterrestre. Esto incluía la preparación de milagros, exorcismos, el control de la naturaleza, curar a los enfermos y ‘resucitar’ a los muertos, tal como se detalla en los Evangelios. Pero la prueba definitiva de que Jesús no era humano fue su resurrección física, algo imposible de ocurrir para la ciencia. Marcos relata que cuando Jesús - por instigaciones de los judíos - fue azotado y tratado brutalmente por los guardias romanos, coronado con espinas y crucificado a la novena hora, que eran las 15:00h de ese día, ‘murió’ al poco tiempo. Su cuerpo fue envuelto en un lino fino y sepultado. Los acontecimientos de aquella primera mañana de Pascua son un verdadero rompecabezas sobrenatural. El Consejo Judío, el Sanedrín, se quedo sin palabras cuando recibieron la noticia de que la tumba de Jesús estaba vacía. Ellos escucharon relatos de cómo, en las primeras horas de la mañana un ser con una túnica “blanca como la nieve” y con una luz sobre la cabeza tan brillante como la mañana había descendido de las nubes y aterrorizado a los guardias romanos que custodiaban el sepulcro. Esta extraña figura, descrita como un ser celestial, movió la piedra colosal que bloqueaba la entrada de la tumba con una fuerza sobrehumana. Este hecho fue revelado a María Magdalena por dos hombres ‘no humanos’ vestidos de blanco que estaban cerca de la entrada de la tumba. Una de las figuras misteriosas dijo: “No tengas miedo, si buscas a Jesús de Nazaret, que fue crucificado, no está aquí… ha resucitado… Dile a sus discípulos, y a Pedro, que él estará con vosotros en Galilea; allí le veréis, como os dijo a vosotros”. Este hombre enigmático se desvaneció en los cielos tan misteriosamente como apareció. ¿Podría haber regresado a la nave nodriza que se encontraba en la órbita de la Tierra? ¿Podría esta nave de origen extraterrestre ser la Estrella de Belén, la que predijo su ‘nacimiento’? Cuando Jesús resucitó reapareció delante de sus fieles discípulos, y parecía haber sufrido una transformación fantasmal, ya que no era el mismo de antes e inspiraba temor. Se dice además que uso la bilocación, ya que muchas personas afirmaron haberlo visto en varios lugares a la vez de forma simultánea. Pero lo mejor estaba reservado para el final, y es el ‘ascenso’ de Jesús resucitado a los cielos, hecho que ocurrió en el Monte de los Olivos, contado con mayor detalle en los libros apócrifos que en el Evangelio, que extrañamente es muy breve al respecto en ese punto. Sucede que el Jesús ‘resucitado’ estaba hablando con sus seguidores, cuando de un momento a otro un trueno y una fuerte iluminación hicieron acto de presencia. El trueno retumbó por toda la montaña, y ‘un carro de fuego descendió a través de las nubes’. Esta carroza es conocido como un Merkaba, un vehículo celestial de ángeles. Los textos describen cómo Jesús entró en el Merkaba, quien fue bien recibido por los ángeles que estaban vestidos con “ropa blanca”. Y los apóstoles vieron con asombro como Jesús se ‘elevó más y más alto’ en el cielo hasta que él y los ángeles en el Merkaba desparecieron de la vista de todos. No era la primera vez que un suceso de esa magnitud aparece en la Biblia, ya que en el Antiguo Testamento, se dice que Elías fue llevado al cielo de la misma manera ¿Podría haber sido este evento su regreso a la nave nodriza para unirse a su padre extraterrestre luego de haber ‘concluido’ su labor en nuestro planeta? Quizás nunca lo sepamos.
