Como sabéis, en las décadas de 1940 y 1950, los informes acerca de “platillos voladores” se convirtieron en un fenómeno cultural mundial. Los avistamientos de objetos extraños en el cielo se convirtieron en la materia prima para que Hollywood presentara visiones de posibles amenazas procedentes de otros mundos. Películas como “Earth vs. the Flying Saucers” de 1956, ilustraron perfectamente este miedo. Relacionados con las ideas actuales sobre la vida en la Luna y las civilizaciones marcianas, los OVNIS han llegado a representar las esperanzas y los terrores más profundos del mundo moderno. ¿Son estos supuestos visitantes de otros mundos benévolos o serían capaces de atacar y destruir a la humanidad? Y si los OVNIS visitan nuestro mundo, ¿dónde se encuentran estos extraterrestres? ¿Podrían estar escondidos entre nosotros? Son muchos los ufólogos y teóricos de los antiguos astronautas que tienen diversas teorías para responder a estas preguntas, pero ahora un reconocido antropólogo ha sugerido otra interesante posibilidad, que los OVNIS están pilotados por humanos del futuro. En efecto, Michael Masters, profesor de antropología biológica en la Universidad Tecnológica de Montana, EE.UU., ha escrito un nuevo libro titulado “Objetos voladores identificados: un enfoque científico multidisciplinario para el fenómeno OVNI (Identified Flying Objects: A Multidisciplinary Scientific Approach to the UFO Phenomenon)», en que el que ofrece una nueva perspectiva y algunas propuestas que invitan a la reflexión. Masters piensa que, dado el ritmo acelerado en la ciencia, la tecnología y la ingeniería, es probable que los humanos del futuro puedan desarrollar el conocimiento necesario para regresar al pasado. El objetivo del libro es generar un nuevo debate entre creyentes y escépticos por igual. “Tomé un enfoque multidisciplinario para tratar de comprender los misterios de este fenómeno”, dijo Masters a Daily Mirror. “Nuestro trabajo como científicos es hacer grandes preguntas y tratar de encontrar respuestas a preguntas desconocidas. Algo está sucediendo aquí, y deberíamos tener un debate al respecto. Deberíamos estar a la vanguardia de tratar de descubrir qué es”. Masters señala que las historias de encuentros cercanos con extraterrestres generalmente describen a los pilotos de los OVNIS como seres bípedos, sin pelo, humanoides con cerebros grandes, ojos grandes, narices pequeñas y bocas pequeñas. Además, en algunos casos se ha informado que las criaturas tienen la capacidad de comunicarse con nosotros en nuestros propios idiomas y poseen avanzada tecnología, desconocida por norotros. Además, cree que a través de un análisis exhaustivo de patrones consistentes de cambio biocultural a lo largo de la evolución humana, así como los recientes avances en nuestra comprensión de los viajes en el tiempo, podemos comenzar a considerar esta posibilidad en el contexto de un fenómeno actualmente inexplicado. “El libro une esos aspectos conocidos de nuestra historia evolutiva con lo que todavía es un aspecto no comprobado y no verificado de los OVNIS y los extraterrestres”, dijo Masters. “Sabemos que estamos aquí. Sabemos que los humanos existen. Sabemos que hemos tenido una larga historia evolutiva en este planeta. Y sabemos que nuestra tecnología va a estar más avanzada en el futuro. Creo que la explicación más simple, de forma innata, es que somos nosotros. Solo estoy tratando de ofrecer lo que probablemente sea la explicación más parsimoniosa” aseveró. Como antropólogo que ha trabajado y dirigido numerosas excavaciones arqueológicas en África, Francia y en todo EE.UU., Masters observa que es fácil conceptualizar cuánto más se podría aprender sobre nuestra propia historia evolutiva si actualmente tuviéramos la tecnología para visitar períodos pasados de tiempo. “Los supuestos informes de abducciones son en su mayoría de naturaleza científica”, continúa explicando Masters. “Probablemente sean futuros antropólogos, historiadores y lingüistas los que regresarán para obtener información de una manera que actualmente no podemos tener sin acceso a esa tecnología. Dicho esto, creo que algunas de sus intenciones también son el turismo. Sin duda en el futuro, hay quienes pagarán mucho dinero para tener la oportunidad de regresar y observar su período favorito en la historia” puntualizó. Sin embargo, la mayor parte de la comunidad científica no está de acuerdo con la teoría propuesta por Masters. Algunos de sus colegas dicen que el antropólogo trata de deducir la historia evolutiva de los extraterrestres a partir de las descripciones de los testigos, por lo que se toma demasiado en serio tales historias. “No hay nada en este libro que se pueda tomar en serio, ya que depende de la creencia de que ‘viajar en el tiempo’ no solo es posible, sino real”, dijo Robert Sheaffer, un escritor independiente estadounidense y escéptico de los OVNIS. “Supuestamente, nuestros descendientes lejanos han dominado el viaje en el tiempo y han viajado en el tiempo para visitarnos. Entonces, según Masters, simplemente giras algo lo suficientemente rápido y comenzará a deformar el espacio, e incluso a enviar cosas hacia atrás en el tiempo. Esta es una afirmación muy dudosa.” Pero Masters también ha encontrado apoyo en algunos científicos, como el astrónomo David Darling, quien reconoce que, si se da por hecho de que algunos OVNIS son naves ‘extraterrestres’, es igual de razonable suponer que podrían ser máquinas del tiempo de nuestro propio futuro. Incluso Larry Lemke, un ingeniero aeroespacial retirado de la NASA encuentra interesante la posibilidad de que los visitantes del futuro viajen en el tiempo. Lemke dijo que la idea de que alguien consiga descubrir cómo manipular el espacio-tiempo, explicaría muchas cosas del fenómeno OVNI, incluidos los desconcertantes objetos en forma de Tic-Tac que fueron perseguidos por pilotos militares estadounidenses. Dejando aparte la controversia entre científicos, Masters cree que usar un enfoque científico multidisciplinario para el fenómeno OVNI es lo que se necesita para resolver este misterio de una vez por todas. La premisa de que los OVNIS son pilotados por personas procedentes del futuro podría explicar el fenómeno, aunque no del todo.
