TIEMPOS DEL MUNDO

jueves, 20 de mayo de 2021

PROJECT MARS/ A TECHNICAL TALE: ¿Una curiosa profecía que indica a Elon Musk como el colonizador de Marte?

¿Qué posibilidades hay de que en 1953 alguien publicara un libro sobre colonizar Marte a través de la figura de un hombre llamado Elon? En efecto, el ingeniero aeroespacial alemán Wernher von Braun escribió el relato más influyente sobre la planificación de misiones humanas a Marte…. y Elon Musk no había nacido. Como sabéis, von Braun, nacionalizado estadounidense en 1955, está considerado como uno de los más importantes diseñadores de cohetes del siglo XX, además de ser el jefe de diseño tanto del mítico V-2 (que arraso con Londres durante la II Guerra Mundial) como del Saturn V, el mismo que llevó al hombre a la Luna. Incluso muchos de los diseños actuales de los sistemas capaces de ponerse en órbita parten de su trabajo. Mientras trabajaba en el programa Apolo, el ingeniero tenía entre ceja y ceja otro proyecto. Wernher siempre dijo que sabía que tras la llegada del hombre a la Luna la carrera espacial pasaría a un segundo plano. Pero él, como genio que fue, ya ideaba un plan para llegar a Marte. Esa idea se convirtió en el libro Project Mars: A Technical Tale. Un relato de ciencia ficción escrito en 1948 sobre una misión tripulada a Marte basado en diagramas y cálculos completos de ingeniería que incluyó en un apéndice al escrito. Es curioso, en un principio la novela no fue publicada, pero el apéndice fue la base de una conferencia que von Braun dio en el primer simposio sobre un vuelo espacial sostenido en el planetario de Hayden en Nueva York (1951). Al poco tiempo, el apéndice se publicaba en una edición especial de la revista alemana de vuelo espacial Weltraumfahrt. A finales del mismo año se publicaba el libro en Alemania como Das Marsprojekt y en Estados Unidos en 1953. La novela se inspiró en las grandes expediciones antárticas que estaban teniendo lugar en la época. El ingeniero creía que los exploradores en Marte se enfrentarían a problemas similares. Además, también acabó siendo un libro muy técnico. Una epopeya que implicaba una flota de diez naves espaciales con 70 miembros de la tripulación que pasarían 443 días en la superficie de Marte antes de volver a la tierra. Una gran nave espacial, siete de pasajeros y tres de carga, se montarían en órbita terrestre utilizando materiales suministrados por los transbordadores espaciales reutilizables. La flota haría uso de un propulsor de ácido nítrico/ hidrazina que, aunque corrosivo y tóxico, podría almacenarse sin refrigeración durante los tres años que duraría la misión. Von Braun calculó el tamaño y peso de cada barco y cuánto combustible requeriría cada uno de ellos para el viaje de ida y vuelta. Las órbitas de transferencia de Hohmann se utilizarían para moverse de la órbita de la Tierra a Marte. Una vez en la órbita de Marte, la tripulación utilizaría telescopios para encontrar un sitio adecuado para el campamento base. Una pequeña nave tripulada se desprendería de una principal en órbita y se “deslizaría hacia uno de los polos de Marte y usaría esquís para aterrizar sobre el hielo”. En este punto, la tripulación recorrería la zona con rastreadores hasta identificar el enclave más adecuado para construir una pista de aterrizaje. El resto del equipo de tierra descendería de la órbita a la pista de aterrizaje en planeadores. Los planeadores también servirían como nave de ascenso para devolver a la tripulación a las naves al final de la misión terrestre. En cuanto a la profecía - en el cual parece que se estaría refiriendo a Elon Musk - en el siguiente pasaje del libro podemos leer lo siguiente: “Una vez instalados, se creó un gobierno marciano dirigido por diez hombres, cuyo líder fue elegido por sufragio universal durante cinco años bajo el nombre o título de Elon. Dos casas del Parlamento promulgaron las leyes que administrarían tanto el Elon como su gabinete. La Cámara Alta fue denominada como el Consejo de los Ancianos y se limitó a nombrar a unas 60 personas, cada una de las cuales fue nombrada de por vida por el Elon como vacantes en caso de muerte”. Por tanto y como vemos, Wernher von Braun imaginó un futuro donde colonizaríamos Marte bajo las órdenes de un enigmático Elon, título o nombre que se le daba al encargado de gobernar el planeta. Desde luego, estamos ante una tremenda coincidencia con el personaje de Elon Musk. ¿Por qué Elon? Según algunos expertos en la materia, parece ser solo un título, más que un nombre propio, muy posiblemente basado en un término bíblico que significa “juez”. Pero tal vez sea mucho más que una simple coincidencia. La NASA le entregó a la compañía SpaceX de Musk un contrato de 2.9 mil millones de dólares para desarrollar una versión de su nave estelar de carga pesada para llevar a los astronautas estadounidenses de regreso a la luna por primera vez desde que terminó el programa Apolo en 1974. Y se espera que la Luna sea un trampolín para una misión a Marte, un proyecto al que Musk menciona una y otra vez. En su tuit del 10 de abril, Elon escribió que irá a la luna muy pronto. Es más, predijo que su compañía SpaceX llevará humanos a Marte en el 2026. Y parece ser que está en lo cierto. Cabe recordar que en una entrevista del 2019 con la revista tecnológica Popular Mechanics, Musk describió vivir en Marte como “bastante manejable”. Es optimista acerca de generar suficiente oxígeno y otros elementos esenciales para los colonos, y dice que “una vez que llegas allí, las cosas son relativamente sencillas”. Sin embargo, “El Elon” advierte que muchos de los primeros pioneros de Marte nunca volverán a casa. “Es un viaje arduo y peligroso en el que es posible que no regreses con vida, pero es una aventura gloriosa”, dijo Musk. Llama la atención además que la nave que llevaría al hombre a Marte y que aparece en la portada del libro de von Braun, tenga un extraordinario parecido a la nave ideada por Musk. Tal vez se trate de una simple causalidad, pero también cabe la posibilidad de que se trate de una visión profética de von Braun y Project Mars: A Technical Tale es una de esas fascinantes coincidencias que se dan muy de vez en cuando. Y quién sabe, quizás acabe siendo una maravillosa profecía.