TIEMPOS DEL MUNDO

jueves, 18 de noviembre de 2021

BAPHOMET: El dios del satanismo por excelencia

Conocido también con otros nombres (como Bafomet, Bafumet, Bafometo o Baffometo) Baphomet es un demonio cuyo culto se le atribuye a los Caballeros de la Orden del Temple. Su nombre apareció por primera vez cuando los templarios fueron enjuiciados por la Inquisición como herejes en el siglo XIV. Durante dicho proceso, muchos de los caballeros de la orden fueron sometidos a brutales torturas, por lo que no tuvieron otra opción que “confesar” numerosos actos heréticos (herejías) por lo que fueron quemados vivos. Entre ellos se incluyó la adoración a Baphomet. En realidad todo fue parte de una conspiración orquestada por el rey de Francia Felipe IV, quien envidioso del poder adquirido por los Caballeros Templarios, decidió apoderarse de sus cuantiosos tesoros, ordenando su persecución el día 12 de octubre de 1307, la cual incluía no solo la detención de todos los templarios de cualquier rango, sino también - y este era el verdadero motivo - la confiscación de las propiedades de la Orden, que pasarían a la corona, esto es, al propio Felipe IV quien se hizo dueño y señor de todo lo robado. Entre las instrucciones que iban acompañadas del manifiesto en el que Felipe IV, explicaba los motivos de su proceder y señalaba los delitos de los que se acusaba, se puede leer: “Como bestias de carga privadas de razón, superando de hecho la irracionalidad de las bestias en su bestialidad, han abandonado a Dios su creador y ofrecido sacrificios a los demonios y no a Dios... gente loca entregada a la adoración de ídolos” en referencia a Baphomet. Todos cargos inventados ya que jamás se encontró estatua alguna del citado demonio, porque el que conocemos actualmente fue obra del célebre ocultista francés Eliphas Lévi quien lo dibujó en 1854, en su libro Transcendetal Magic: Its Doctrine and Ritual (Magia Transcentental: Su doctrina y ritual) dándole un aspecto de “Cabra Sabática”, el cual contiene elementos binarios representando la "suma total del universo" (es decir, hombre y mujer, bueno y malo, etc.). Desde entonces, su vinculación con el macho cabrío de los aquelarres, como así también con Satanás y otros seres infernales de menor rango ha sido inevitable. En cuanto al nombre de Baphomet apareció en varias de confesiones sacadas a la fuerza a los templarios por sus verdugos inquisidores. Peter Partner afirma en su libro de 1987,The Knights Templar and Their Myth (Los Caballeros Templarios y su Mito): "En el juicio de los Templarios uno de los principales cargos era su supuesto culto a un cabeza-ídolo pagano conocido como Baphomet (Baphomet = Mahomet). La descripción del objeto cambiaba de una confesión a otra. Algunos templarios negaban cualquier conocimiento de ello. Otros, bajo tortura, la describieron ya sea como una cabeza cortada, un gato negro o una cabeza con tres caras. Los Templarios poseyeron varias cabezas de plata dorada como relicarios, sin embargo, las afirmaciones de un ídolo llamado Baphomet eran únicas en las confesiones arrancadas a los Templarios. Karen Balls, autor de Knights Templar Encyclopedia (Enciclopedia de los Caballeros Templarios) discute que es importante que "ninguna prueba concreta [de Baphomet] aparece ni en la Norma del Temple o en ningún otro documento templario del periodo medieval". Los académicos modernos, como Peter Partner y Malcolm Barber, coinciden en que el nombre Baphomet era una corrupción del francés antiguo del nombre Mahoma, con la interpretación de que algunos Templarios, tras su larga ocupación militar en el Medio Oriente durante las Cruzadas, habían empezado a incorporar ideas islámicas a su sistema de creencias, y que esto fue visto y documentado por los Inquisidores como herejía. Alain Demurger, sin embargo, rechaza la idea de que los Templarios podían haber adoptado las doctrinas de sus enemigos. Helen Nicholson escribe que los cargos fueron esencialmente "manipulativos" ya que los templarios “fueron acusados falsamente de convertirse en musulmanes". Los cristianos medievales creían que los musulmanes eran idólatras y adoraban a Mahoma como su dios, con Mahomet significando ídolo o falso dios. Aunque académicos modernos y el Diccionario de Inglés Oxford coincidieron en que el origen del nombre Baphomet era una probable versión en francés antiguo de "Mahomet" se han propuesto también etimologías alternativas, conectando en el siglo XVIII a los templarios con los orígenes de la francmasonería. Así, el vendedor de libros, francmasón e iluminista Christoph Friedrich Nicolai (1733-1811), en Versuch über die Beschuldigungen welche dem Tempelherrenorden gemacht worden (1782), fue el primero en afirmar que los templarios eran gnósticos, y que "Baphomet" estaba formado de las palabras griegas βαφη μητȢς, baphe metous, que significaban Taufe der Weisheit, "Bautismo de sabiduría". Nicolai "enlazó a la idea de la imagen del dios supremo, en el estado de sosiego atribuido a él por los gnósticos maniqueos", según F. J. M. Raynouard, y "supuso que los templarios tenían una doctrina secreta e iniciaciones de varios grados" que los sarracenos les habían comunicado...a ellos". En cuanto a la imagen de Baphomet creado por Lévi es similar a la del diablo en las primeras cartas del tarot. Lévi creía que la supuesta adoración al diablo del sabat de las brujas medievales era una perpetuación de los ritos paganos antiguos. De otro lado, el concepto de un pentagrama invertido en su cabeza fue expandido por Lévi en su discusión de la Cabra de Mendes dispuesto en un pentagrama, que contrastaba con el hombre microcósmico dispuesto en un pentagrama similar sin invertir. La imagen actual de la cabra en un pentagrama invertido apareció por primera vez en el libro de 1897 La Clef de la Magie Noire de Stanislas de Guaita, una imagen que luego fue adoptada como símbolo oficial - llamado Sigilo de Baphomet - de la iglesia de Satán, y continúa usándose entre los Satanistas. Precisamente en el 2014, el Templo Satánico encargó una estatua de 2,5 metros de Baphomet para permanecer fuera junto a un monumento de los 10 Mandamientos en el Oklahoma State capitol, (EE.UU) citando el "respeto por la diversidad y minorías religiosas" como razón para erigir el monumento. Tras vandalizarse el monumento a los 10 Mandamientos, los planes para erigir la estatua de Baphomet se suspendieron, ya que el Templo Satánico no quería que su estatua permaneciera sola en el Oklahoma capitol. Cuando el Tribunal Supremo de Oklahoma declaró ilegales todas las imágenes religiosas, la estatua de Baphomet fue erigida el 25 de julio del 2015 en Detroit como símbolo del movimiento satanista moderno. La estatua de bronce mide 2,7 metros y representa un hermafrodita alado con una antorcha entre sus cuernos y un pentáculo en la frente. En sus brazos lleva escrito las palabras en latín "solve" (separar) y "coagula" (unir), los poderes de ser "atado y desatado" usurpado de dios. "Nuestra estatua servirá como faro llamando a la compasión y a la empatía entre las criaturas vivientes", aseguro Lucien Greaves, cofundador del grupo, el día de su inauguración. "Contiene todos esos opuestos binarios: arriba y abajo, parte animal y parte humano, macho y hembra", explicó Greaves. "Encarna opuestos y celebra los contrastes", agregó. Los dos dedos de la mano derecha estirados señalando hacia arriba y los dos de la mano izquierda significan "como es arriba, es abajo". Estas palabras y el gesto que lo acompañan es familiar para los ocultistas. Provienen de las obras antiguas de Hermes Trismegisto, cuyos escritos se hicieron populares durante el Renacimiento y Reformismo. La frase se usa también en relación a la ciencia, el universo y Dios, pero como Levi lo escribió, haciendo ese gesto, su Baphomet "expresa la perfecta armonía de la misericordia con la justicia" aseveró. "El rostro de la cabra tiene una expresión neutra. No es demoniaca, feroz o monstruosa, como se podría imaginar, si se miras sin el bagaje cultural", de lo que implica la estatua. En la parte del estómago de Baphomet hay un antiguo símbolo griego de dos serpientes enroscadas alrededor de una vara, que según la mitología perteneció a Hermes. El caduceo simboliza el comercio, la negociación y la reciprocidad fue incluida en el Baphomet de Levi. "Para nosotros simboliza la reconciliación de los opuestos, como tener un monumento satánico frente a uno cristiano", apunto Greaves en aquella oportunidad. Por cierto, la antorcha ubicada en el cuerno del medio, glorifica la búsqueda del conocimiento. Como escribió Levi: "La llama de la inteligencia brillando entre sus cuernos es la luz mágica del equilibrio del universo, la imagen del alma sobre la materia, mientras la llama, está atada a la materia y brilla por encima de ella". Para finalizar, es curioso que los grupos de Heavy Metal se hayan identificado con los símbolos demoniacos como el pentagrama y en especial de Baphomet, una figura muy importante para ellos, puesto que muchas bandas le rinden homenaje tanto en sus canciones como en las portadas de sus álbumes.