TIEMPOS DEL MUNDO

jueves, 11 de noviembre de 2021

LA CONSPIRACIÓN DEL SILENCIO: ¿Porque se insiste en encubrir la verdad acerca de los OVNIS?

Ross Coulthart, galardonado periodista de investigación y autor de un nuevo libro titulado 'In Plain Sight' - el cual registra una serie de misteriosos avistamientos de OVNIS en todo el mundo - nos detalla los extraordinarios esfuerzos de los gobiernos para encubrir la verdad acerca de su existencia. Como sabéis, en los últimos 12 meses ha habido una explosión de iniciativas acerca de los OVNIS, incluida la formación de la Coalición Internacional para la Investigación Extraterrestre y el lanzamiento del Proyecto Galileo. Y luego está el ya conocido informe propalado por el Pentágono, en el cual admitió una serie de incidentes acerca de “fenómenos aéreos no identificados” (UAP, en inglés) que no se pudieron explicar. Sin embargo, el nuevo libro 'In Plain Sight' podría proporcionar datos aun más interesantes. Coulthart no tiene una reputación que mantener en la comunidad OVNI, pero durante mucho tiempo ha tenido el deseo de abordar esa gran pregunta: ¿estamos realmente solos? “Siempre me ha intrigado el tema, principalmente porque hay un tabú acerca del tema. En el periodismo, hay un estigma real hablar seriamente de ello” indicó. “Recuerdo que los editores me dijeron: 'Ross, no pierdas el tiempo ya que no publicamos historias de OVNIS'. Quienes me conocen saben que hice muchas historias relacionadas con la inteligencia de defensa y seguridad nacional. He pasado gran parte de los últimos 30 años cubriendo guerras, actos terroristas y todas las miserias del mundo. Y muchos de esos contactos [que hice]... cuando les pregunté acerca de los OVNIS, no descartaron la idea de que existían". Nacido en Nueva Zelanda, Coulthart quedó fascinado por el incidente de 1978 en el que un camarógrafo capturó imágenes de un objeto no identificado que volaba junto a un avión sobre la ciudad de Kaikoura ubicado en el sur del país. Pero a las pocas semanas, las autoridades atribuyeron el extraño fenómeno al planeta Venus o al reflejo de los barcos de pesca. “En esa época tenía 16 años, por lo que me parecía plausible la explicación, así que no le di mucha importancia” admitió. Pero, en la universidad, Coulthart se entero de la verdad por boca de los involucrados, quienes le aseguraron que lo que vieron era en realidad un objeto sólido de origen desconocido. En los años 90 Coulthart era periodista y estaba trabajando en el programa de televisión de investigación australiano 'Four Corners'. Tras la conclusión de un día de filmación en una base de la fuerza aérea, el anfitrión invitó a la tripulación a tomar una copa en el bar del lugar. Coulthart recordó: “Luego de un rato, se inclinó hacia adelante y me dijo: '¿Puedo hacerte una pregunta? ¿Por qué los medios de comunicación nunca publican historias sobre OVNIS?’.Admito que me reí y le dije: 'Porque son unos idiotas'. Y él respondió: 'No, no lo son'. Ojalá pudiera decir quién era este tipo: era un funcionario de muy alto nivel, una de las personas más importantes de nuestro ejército en ese momento” aseveró. Obstaculizado por los parámetros de los principales medios de comunicación que se negaban a tratar el tema, logró convencer a sus jefes para hacer una historia sobre los OVNIS en el 2011, pero fue solo porque lo habían enviado a Londres para entrevistar a una estrella de rock que canceló a último momento y tenían que cubrir el espacio. Entonces, Coulthart investigó los informes de un avistamiento en 1980 cerca de la base de la RAF Bentwaters y localizó al coronel Charles Halt , quien afirmó haber visto un objeto volador. Recordó: “Le dimos media hora para que se transmitiera y simplemente se volvió loco. El público estaba muy interesado y, lo que es más importante, lo que nos sorprendió fue la cantidad de personas que llamaban y ofrecían información” admitió.“Me estaban contactando desde toda Australia, diciendo que habían visto objetos similares. Se sorprendieron de que los medios finalmente informaran sobre esta historia. Lo bueno para ellos fue que no lo estábamos ridiculizando, estábamos tratando el tema con respeto”. Precisamente 'In Plain Sight' contiene un análisis detallado de muchos avistamientos, incluido el favorito personal de Coulthart de un hombre sentado en un cine al aire libre en el desierto del sur de Australia cuando apareció una nave cilíndrica. El espectador afirmó que podía ver luz dentro de sus ventanas. Coulthart se embarcó escribir el libro tras trabajar como autónomo y deshacerse de los grilletes de los editores desdeñosos, y dice que la reciente admisión del Pentágono de que hay algo ahí fuera ha sido realmente positiva. Explicó: “Esencialmente hay una sola línea que es repetida por cualquier nación de Five Eyes [Reino Unido, EE.UU., Canadá, Nueva Zelanda y Australia]. Si preguntas, '¿Son reales los OVNIS?', No respondían directamente a la pregunta y decían que no hay ningún problema de seguridad nacional con ellos y que no representan una amenaza para la seguridad del vuelo. Pero, en julio de este año, todo cambió drásticamente”. Cualquiera puede leer ese informe. Dice muy claramente que los OVNIS son una amenaza para la seguridad nacional. Es un cambio total. Nadie en el Pentágono explica por qué han hecho esto, pero creo, y me han dicho, que es porque se dan cuenta de que el juego se acabó. Tienen que aclarar eventualmente lo que saben”. En su libro, Coulthart profundiza además en el estrecho vínculo entre los OVNIS y las instalaciones nucleares. 'In Plain Sight' comienza con la historia de 1991 de una mujer llamada Annie Farinaccio, quien había estado en una fiesta en una base estadounidense en el remoto Cabo Noroeste de Australia. Dos policías le ofrecieron llevarla de regreso a la ciudad y nunca ha olvidado lo que vio mientras conducían. “Annie estaba sentada allí petrificada. Miró hacia arriba a través del parabrisas y gritó, ya que observo una gigantesca nave triangular con luces flotando justo encima de ellos mientras conducían a 100 km / h por esa carretera” dijo Coulthart. “Pero en un abrir y cerrar de ojos, subió a 1,000 pies y luego cayó hacia el lado izquierdo del automóvil. En ese momento, ella está suplicando a la policía que la deje en la ciudad, y luego se percató que el OVNI se elevó nuevamente y luego al lado derecho del automóvil”. La base albergaba transmisores de muy baja frecuencia que, en caso de guerra, enviarían señales a los submarinos nucleares estadounidenses. Annie recibió la visita de funcionarios estadounidenses, la llevaron de regreso a la base y le dijeron que había visto un globo meteorológico, a pesar de que la nave no se parecía a uno de ninguna manera. El libro registra otro incidente, en Rusia, en el que las armas en un silo nuclear habían sido armadas misteriosamente, listas para ser lanzadas, sin ninguna participación de los oficiales. Coulthart dijo: “Estaban en pánico. La inteligencia parecía estar demostrando que, independientemente de sus sistemas de seguridad, se pueden violar. Si se trata de algún tipo de inteligencia, parece estar enviando un mensaje, parece estar expresando algo sobre el uso o posible uso indebido de armas nucleares”. También se incluye en el libro la historia del maestro Andrew Greenwood, de Clayton South, un suburbio de Melbourne. Junto con sus estudiantes de secundaria, vio aparecer un disco metálico en un cielo sin nubes. Greenwood habló con los medios locales antes de ser silenciado. Coulthart dijo: “Aquí es donde las cosas se ponen muy siniestras. A dos semanas del incidente, llamaron a la puerta de su casa. Se trata de un hombre vestido de uniforme, un oficial superior, y el otro caballero que era oficial de algún tipo, quizás un oficial de policía o un oficial de inteligencia, más probablemente”.“Andrew todavía está enojado por lo que hicieron. Lo amenazaron rotundamente y le dijeron: 'Si habla más de lo que vio, nos aseguraremos de que pierda su trabajo, diremos que bebió como maestro'. Andrew no tiene ninguna razón para mentir sobre esto y, lo que es más importante, lo que dice que vio está respaldado por 167 testigos, todos en el registro, en el último recuento. Realmente es el caso más extraordinario". Coulthart ha desenterrado más revelaciones, incluidas sugerencias de naves no humanas recuperadas. Las fuentes afirman que EE. UU. y Rusia tienen instalaciones en las que se almacenan, pero Coulthart dice que en general es escéptico sobre tales afirmaciones sin haber visto pruebas. “Ese es el mayor problema que tengo. Los gobiernos no saben guardar secretos y yo hubiera pensado que si el gobierno estadounidense tuviera secretos como ese, entonces ya se habría filtrado, y no lo ha sido” , dijo. “Pero, cuando miras en los archivos del gobierno de los EE.UU… por eso llamé a mi libro 'In Plain Sight'. La evidencia está ahí, a la vista. Hay archivos de la CIA que muestran que estaba trabajando con el Departamento de Defensa de los EE.UU. para recuperar lo que los documentos denominan 'platillos voladores' tanto en Nepal como en Afganistán”. Junto con el libro, Coulthart ha producido un documental sobre OVNIS y ha recibido un nivel alentador de apoyo por parte de los colegas de los medios y del público por igual. “La respuesta ha sido alucinante. Nunca en mi carrera tuve una respuesta como la que tuve a este tema”, explicó. “Ha sido abrumador. Estoy exhausto todos los días, me despierto y hay literalmente de 300 a 500 correos electrónicos, personas que me cuentan sobre sus avistamientos, personas que me ofrecen mayor información. Es como si hubiéramos abierto una herida y toda la realidad se estuviera derramando”. Sin embargo, el objetivo principal del libro es atravesar la niebla. Según Coulthart, es casi como si los medios de comunicación no quisieran admitir que se han quedado dormidos al volante. “Ellos están fallando aquí. Se encuentran atrapados en el paradigma impuesto, absurdamente, la CIA y la Fuerza Aérea de los EE.UU. en la década de 1960. La CIA decidió suprimir las historias de OVNIS, no sé por qué, pero se afirma que era porque les preocupaba que las personas que informaban sobre ello se interpusieran en el camino de los espías que brindaban una temprana advertencia acerca de un misil balístico intercontinental ruso, capa de llegar a los EE.UU. Es un argumento absurdo como aquellos que quisieran evitar que la gente interrumpa los teléfonos en NORAD [el Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte] con avistamientos. Es simplemente ridículo” advirtió. Para un hombre adepto a las palabras, Coulthart concluye describiendo este tema complejo de manera sucinta y apropiada. Si bien hasta ahora no se ha podido averiguar todo lo que los gobiernos y las agencias de seguridad saben sobre los OVNIS, tiene claro por qué se ha considerado que el tema es el pasatiempo de los tontos. “Nos han manipulado para que creamos en ello. Nos han mentido” puntualizó.