“No estoy diciendo que sean extraterrestres. Pero son extraterrestres”. Como sabéis, este es el lema de un famoso meme de Internet basado en el programa de History Channel de Giorgio Tsoukalos, “Ancient Aliens”. Pero ahora parece ser también la línea oficial del gobierno de los EE.UU. En efecto, el pasado mes de julio llegó la última revelación sobre OVNIS y extraterrestres en The New York Times, que casualmente deja caer otra historia sobre cómo los extraterrestres son reales. Incluso hay informes de que el Pentágono tiene en su poder restos de vehículos “no fabricados en nuestro planeta”. Tenemos que recordar que las noticias sobre la existencia de los OVNIS se limitaban a noticias alternativas y los principales medios de comunicación ni las mencionaban. Pero hace unos meses, la Marina de los EE.UU. publicó videos de naves alienígenas, y desde entonces siguen apareciendo más noticias, lo que sugiere al menos que el gobierno estadounidense se está tomando más en serio de lo que pensamos, la posibilidad de que los extraterrestres visiten la Tierra, e incluso hay quien cree que nos está preparando para la “Gran Revelación” o “Primer Contacto”. Y ahora han surgido archivos desclasificados confirmando la existencia de gigantescos ‘extraterrestres similares a los humanos’ según dio a conocer esta semana The Daily Star. El FBI ha desclasificado documentos que mencionan “naves alienígenas y seres multidimensionales”. El informe de casi 70 páginas fue escrito por un profesor anónimo y recientemente filtrado en Internet. Los documentos denominados Memorandum 6751 aluden los encuentros con extraterrestres que se remontan a 1947, mencionando “discos” con rayos y otros objetos extraterrestres. “Una situación muy seria puede desarrollarse en cualquier momento con respecto a los platillos voladores”, dice el memorándum, indicando que en la mente de la gente esto podría crear “pánico” junto con la desconfianza internacional. “Si uno de estos es atacado, el avión atacante será destruido casi con seguridad”. El autor anónimo del informe procede a describir los “platillos voladores” y la forma en que operan. “Parte de los discos llevan tripulaciones, otros están bajo control remoto”, menciona el autor del informe, que además insiste en que su misión no es más que pacífica, pero poseen suficiente capacidad para lidiar con armamento humano, al que consideran primitivo. El memorándum alega que los visitantes, parecidos a humanos pero mucho más grandes, contemplan instalarse en este plano, y viajan en las naves que cuentan con un tipo de energía radiante, o rayo, que fácilmente desintegrará cualquier atacante. Señalando la inigualable capacidad de evasión de los objetos, dice que vuelven a entrar desde el etérico a voluntad y simplemente desaparecen de nuestra visión sin dejar rastro. Estos son algunos de los detalles del Memorandum 6751 redactado el 8 de julio de 1947, el mismo día que el primer comunicado de prensa sobre la recuperación de un “disco volador” estrellado en un rancho cerca de Roswell. Como hemos comentado anteriormente, el autor es anónimo, pero dice que posee varios títulos universitarios. También hay que decir que el memorándum fue escrito para el FBI y no es un informe de investigación del FBI. A diferencia de los primeros informes de Roswell, este documento se refiere a “seres vivos” mucho más grandes en tamaño que los humanos, que nos visitan regularmente, y ocupan otra dimensión diferente a la nuestra en lugar de otro planeta. Tampoco dice cómo el investigador anónimo obtuvo toda esta información. A partir de aquí la información sobre el Memorandum 6751 es confusa. Hay quien dice que los documentos se publicaron “recientemente”, pero hay un video subido a YouTube que los muestra en 2018. Desafortunadamente, las otras 66 páginas no están disponibles. Por otra parte, el portal de noticias Film Daily ofrece otra revelación interesante, aunque también indocumentada. Al parecer hace una década el FBI desclasificó un documento de setenta páginas y lo puso en su base de datos en Internet llamado The Vault. Film Daily dice que el Memorandum 6751 fue desclasificado en el2010 y publicado en The Vault. También dice que los ufólogos mencionan con frecuencia ese informe, pero hasta el momento nadie conocía de su existencia. Ciertamente este memorándum tiene todo lo que necesitemos, revelaciones sobre extraterrestres, polémica e información confusa. Pero independientemente de su origen, lo que nadie puede negar es que este 2020 está siendo un año realmente activo en lo que se refiere a la actividad alienígena. Cada vez son más los que consideran que nos están preparando para la “Gran Revelación”. Y seamos realistas, si vienen, este año es perfecto para su llegada, ya que están ocurriendo eventos realmente inesperados. Desde avispas asesinas hasta una pandemia global y ahora, una invasión extraterrestre... suena bien.
Hace miles de millones de años, cuando el Sistema Solar era aún muy joven, uno de sus planetas disfrutaba de un clima templado, con cielos azules y grandes cantidades de agua corriendo y formando mares y ríos por toda su superficie. Pero ese mundo privilegiado no era la Tierra, sino Venus. Estudios recientes apuntan que allí la vida habría podido desarrollarse por lo menos durante 3.000 millones de años. Hoy, sin embargo, las cosas son muy diferentes. Es la Tierra la que dispone de agua en abundancia y goza de un rango de temperaturas que hacen posible el florecimiento de la vida, mientras que Venus se ha convertido en un auténtico horno, con temperaturas que alcanzan los 450 grados y una atmósfera venenosa formada principalmente por dióxido de carbono y nitrógeno. Un infierno para la vida tal y como la conocemos. Sin embargo, algo de ese antiguo esplendor podría haber sobrevivido lejos del suelo, en su atmósfera. De hecho, a una altitud entre los 40 y los 60 km sobre la ardiente superficie, la atmósfera de Venus es la que más se parece a la de la Tierra en todo el Sistema Solar. Allí la presión del aire es muy similar a la terrestre y las temperaturas se mueven en un arco que va desde los cero a los 50 grados centígrados. Algo no apto para humanos, desde luego, pero sí, quizá, para otro tipo de criaturas. Ya en 1967, Carl Sagan especulaba con la posibilidad de que ciertos microbios podrían sobrevivir fácilmente en esa franja atmosférica de Venus. Y un artículo del 2004 proponía que el azufre de la atmósfera podría ser utilizado por esos microbios como un medio para convertir la luz ultravioleta a otras longitudes de onda que permitirían incluso la fotosíntesis. En el 2018, otro estudio llegó a plantear que las manchas oscuras que aparecen en la atmósfera venusina podrían ser algo parecido a las floraciones de algas que ocurren de forma rutinaria en los lagos y océanos de la Tierra. Ahora, un equipo internacional de científicos ha detectado en las nubes de Venus trazas de una molécula poco común, la fosfina, indicativa de la potencial presencia de vida en el planeta. La nueva investigación, publicada este lunes en la revista Nature Astronomy , podría apuntar a tal vida aérea extraterrestre. “Cuando obtuvimos los primeros indicios de fosfina en el espectro de Venus, ¡fue un shock!”, afirma en un comunicado del Observatorio Europeo Austral (ESO, por sus siglas en inglés) la responsable del equipo, Jane Greaves, de la Universidad de Cardiff (Reino Unido). Estas primeras observaciones fueron llevadas a cabo en el año 2017 mediante el Telescopio James Clerk Maxwell, situado en Hawai. El grupo buscó confirmar los datos mediante tecnología complementaria, algo que fue posible en el 2019. El equipo, que incluye a investigadores de Reino Unido, Estados Unidos y Japón, estimó a partir de las marcas obtenidas en los espectros que la fosfina existe en las nubes de Venus en una concentración muy pequeña, sólo una veintena de moléculas por cada mil millones. A partir de aquí, realizaron cálculos para ver si estas cantidades podían provenir de procesos naturales no biológicos en el planeta. Algunas posibles explicaciones para su presencia incluían rayos, volcanes o minúsculos meteoritos, pero ninguna de estas fuentes podría generar la cantidad suficiente. “Si ningún proceso químico conocido puede explicar la fosfina en la atmósfera superior de Venus, entonces debe producirse mediante un proceso que antes no se consideraba plausible para las condiciones de Venus. Esto podría ser fotoquímica o geoquímica desconocidas, o posiblemente vida”, explican los autores en el artículo. Para la producción de este gas, compuesto por tres átomos de hidrógeno y un átomo de fósforo, las bacterias de nuestro planeta toman fosfato de minerales o de material biológico a los que añaden el hidrógeno. Probablemente, cualquier organismo de Venus sería muy diferente a sus primos terrestres, pero también podrían ser la fuente de la fosfina detectada en la atmósfera. El equipo cree que su descubrimiento es significativo porque pueden descartar muchas formas alternativas de producir la molécula recientemente detectada, pero reconocen que confirmar la presencia de vida necesita de mucho más trabajo. Aunque las nubes altas de Venus presentan agradables temperaturas de hasta 30 grados centígrados, son increíblemente ácidas -alrededor del 90% de su composición es ácido sulfúrico-, lo que plantea problemas importantes para cualquier microbio que intente sobrevivir en ese entorno. Un auténtico ecosistema flotante en Venus, ¿es posible? “Este estudio demostraría la existencia de vida en Venus, por lo que es revolucionario”, opino James Garvin, jefe científico del Goddard Space Center de la NASA, quien lleva 40 años investigando Venus. “Esta investigación cambia nuestro punto de vista y nos muestra que la vida puede estar en lugares inesperados”. Como recordareis, el mundo aún estaba sumido en la Guerra Fría cuando en 1985 penetró en Venus la última nave humana que ha visitado este planeta - lanzada por los rusos - que logro posarse en su superficie. De eso hace una generación. Ahora sabemos que Venus tuvo un océano hace millones de años y que la vida pudo surgir allí. A propósito, en enero del 2012 Leonid Ksanfomaliti, un reputado investigador de la Academia de Ciencias de Rusia, protagonizó un insólito episodio cuando anunció haber descubierto signos de vida en Venus en fotografías tomadas por la sonda rusa Venera-13 hace ahora casi cuarenta años. En concreto, llamó la atención sobre unas supuestas criaturas de hasta quince centímetros, entre ellas una especie de “escorpión” que incluso se enterraba en la superficie ardiente del planeta. Al parecer, esos extraordinarios seres venusinos jamás existieron. Probablemente, Ksanfomaliti solo vio unos componentes mecánicos. El misterio sobre lo que se podrian encontrar en Venus ha crecido desde entonces con el paso de los años. Precisamente Garvin lidera una posible misión de la NASA para regresar al planeta y analizar por primera vez la composición detallada de su atmósfera en la próxima década. “No podremos entender qué está pasando allí hasta que no volvamos” puntualizó.
Oculto en el desolado paisaje rocoso del Parque Nacional Hingol, cerca de la costa de Makran en Baluchistán, Pakistán, se encuentra una enorme estructura que ha pasado inadvertida e inexplorada durante siglos. La enorme formación de roca anómala se conoce como, la ‘Esfinge de Baluchistán’. Fue en el 2004 cuando por primera vez que el público se enteró de su existencia, luego de que una carretera adyacente a la enigmática estructura fuera abierta. La mayoría piensa que la ‘esfinge’ fue tallada por el viento y la lluvia, y no es más que una formación natural. Pero también hay quienes opinan de otra manera. El investigador Bibhu Dev Misra, del Instituto Indio de Tecnología, cree que la ‘Esfinge de Baluchistán’ es un enorme complejo arquitectónico creado por una avanzada civilización antigua. Según Dev Mistra, la ‘esfinge’ parece vestirse con un tocado que se parece mucho al Nemes egipcio, un paño rayado usado en la cabeza por los faraones en el antiguo Egipto. Esta también tiene un surco horizontal en su frente, que corresponde a la diadema faraónica que sostiene al Nemes en su lugar. El investigador indio también señala que las orejeras se pueden ver claramente en la ‘esfinge’, así como los contornos de las patas delanteras reclinadas, que terminan en patas muy bien definidas. “La importancia de estos monumentos antiguos de la costa de Makran difícilmente puede ser exagerada, literalmente puede tener miles de años, y potencialmente nos puede proporcionar pistas importantes para descubrir el misterioso pasado de la humanidad”, dice Bibhu Dev Misra. Por su parte, Raja Deekshithar, quien descubrió la ‘esfinge’ en la civilización india, llegó a la conclusión de que la posición principal del mitológico animal estaba cerca de la puerta de un templo, actuando como guardián del santuario. “Si la ‘Esfinge de Baluchistán’ es de origen artificial, ¿se construyó para proteger un antiguo templo desconocido en la costa de Makran? Puede que sí”, argumentó. Muy cerca de la citada ‘esfinge’ existe otra estructura importante. Desde la distancia, se puede observar una formación que se asemeja a un ‘templo’. Una mirada más cercana revela una clara evidencia de pilares tallados en un muro fronterizo. La entrada del ‘templo’ es visible detrás de un gran montón de sedimentos. Una estructura elevada, esculpida, a la izquierda de la entrada podría ser un santuario secundario. La presencia de figuras esculpidas en la fachada otorga mayor peso a esta estructura. En todo el mundo antiguo, la esfinge actuó como protector de los lugares sagrados. Quizás no por casualidad, la ‘Esfinge de Baluchistán’ también parece estar protegiendo la estructura adyacente a él. Esto sugiere que el sitio fue diseñado de acuerdo con los principios de la arquitectura sagrada. Este extraño afloramiento rocoso tampoco es el único, ya que otra característica inusual que parece una estatua y que es llamada “Princesa de la Esperanza” también se encuentra cerca del lugar. Por supuesto, ambas características siguen siendo explicadas como nada más que formaciones naturales ‘talladas por el viento y la lluvia’, pero, ¿podría haber más que esto? Puede que sí. La plataforma elevada en la que se encuentran la ‘esfinge’ y el ‘templo’ parece haber sido tallada con pilares, nichos y un patrón simétrico que se extiende por toda la parte superior de la plataforma. Algunos de los nichos pueden ser puertas que conducen a cámaras y pasillos debajo de ambas ‘construcciones’. También es interesante observar que la ‘Esfinge de Baluchistán’ y el ‘Templo’ están situados en una plataforma elevada, al igual que la Esfinge y las Pirámides de Egipto que se construyeron en la meseta de Giza con vistas a la ciudad de El Cairo. Otra característica destacada de este sitio es una serie de escalones que conducen a la plataforma elevada. Los escalones parecen estar espaciados uniformemente, y con altura uniforme. Todo el lugar da la impresión de ser ‘un gran complejo arquitectónico’ tallado en la roca, que ha sido erosionado por los elementos y cubierto por capas de sedimentos, enmascarando los detalles más intrincados de las esculturas. Las características simétricas que se pueden ver en el sitio ¿son una reminiscencia de la actividad humana, o fueron hechas por la naturaleza? Si es ‘una estructura artificial’ o una formación natural no se puede determinar en este punto. ‘La Esfinge de Baluchistán’ ciertamente tiene una historia antigua que contar. La pregunta por resolver es: ¿que se esconde detrás de todo ello?
Una de las teorías de conspiración más recurrentes por los ufólogos es su convencimiento acerca de que la NASA - y otras agencias espaciales - ocultan información acerca de la existencia de gigantescos cubos alienígenas (similares a las naves Borg de la serie Star Trek) que orbitarían el Sol para extraer su energía. En relación a la agencia espacial estadounidense, se le ha relacionado con una gran cantidad de encubrimientos de alto nivel, que incluyen: Los ‘alunizajes’ del Apolo de 1969 a 1972 fueron un montaje realizado por los EE.UU. para hacer creer al publico acerca de ‘su superioridad militar y tecnológica’ sobre Rusia; Ocultar la existencia de vida extraterrestre en el Planeta Rojo, tal como lo demostró la celebre fotografía tomada por la Viking 1 de la ‘Cara de Marte’ el 25 de julio de 1976; El famoso incidente Roswell, acerca de la caída de una nave alienígena en el verano de 1947; O la cooperación que actualmente realiza con civilizaciones de otros mundos. Como podemos comprobar, las conspiraciones de la NASA abarcan todo tipo de acusaciones, y que la agencia espacial ha negado durante mucho tiempo. Y de nuevo hay una nueva polémica, esta vez relacionada con la presencia de un enorme cubo negro en el Sol. Un investigador del tema OVNI ha descubierto lo que parece ser una enorme nave extraterrestre de similares características orbitando nuestra estrella. En efecto, el extraño avistamiento fue informado por el popular ufólogo Scott C. Waring en su blog UFO Sightings Daily. . En una reciente publicación, Waring declaró que detectó el supuesto cubo extraterrestre mientras revisaba las imágenes del Observatorio Solar y Heliosférico (SOHO) de la NASA. SOHO es una sonda espacial lanzada por la NASA en 1995 para observar el Sol tomando imágenes de su superficie. Originalmente se suponía que cumpliría su misión durante dos años, pero la NASA decidió extender sus operaciones. Mientras Waring revisaba el sitio web de SOHO, se encontró con una imagen del Sol que le llamó la atención. La foto muestra la enorme estrella con un objeto oscuro de forma cuadrada frente a ella. Luego de analizar la imagen y acercarse a la anomalía, Waring dijo que podría ser una gigantesca nave extraterrestre alimentándose de nuestra estrella más cercana. Según la imagen, Waring estimó que el objeto podría ser aproximadamente 10 veces más grande que la Tierra. Además, añadió que la supuesta nave al parecer no estaba en el exterior del Sol, sino más bien en su interior, ya que el investigador cree que es hueca. Waring también afirmó que el extraño objeto podría estar recolectando partículas raras del Sol como una esfera Dyson, la cual como sabéis, es una hipotética megaestructura utilizada por civilizaciones extraterrestres. Para funcionar correctamente y mantener sus operaciones, una esfera Dyson se sitúa cerca de una estrella para recolectar energía. “Un cubo alienígena aparece en una imagen enviada por SOHO”, escribe Waring. “Este cubo tiene una superficie negra no reflectante, como un avión de combate silencioso. Absorbe, pero no refleja. Este cubo es muchas veces más grande que la Tierra misma. Está en el hemisferio norte de nuestro Sol. Se ve yendo y viniendo y se piensa que los cubos crearon un Sol hueco para vivir dentro y recoger energía o hay algunas partículas especiales de las que aún no somos conscientes en nuestra posición de existencia. Y estas naves cúbicas están reuniendo esas partículas raras. El camino del éter, es su Sol, no el nuestro. Nosotros no tenemos control sobre él tanto como lo hacen y que las especies exóticas probablemente existieron mucho antes de que existiera la Tierra. Entonces… ¿qué derecho tenemos para reclamar el Sol como nuestro?” agrego. “Sin embargo, existe la posibilidad de que la NASA esté utilizando el cubo negro para ocultar naves extraterrestres. Este cubo estaba atrapado entre el SOHO y el Sol. He visto el cubo antes de que la NASA lo sustituyera por otro sin anomalías. Este tipo de cubos a veces se han visto en tres dimensiones y en otras ocasiones, solo en dos" puntualizó. En un principio este sería una imagen de OVNIS como otra cualquiera, a no ser porque la propia NASA se ha pronunciado al respecto, ofreciendo una explicación disparatada e imposible de creer. En efecto, Bernhard Fleck, científico del proyecto SOHO y gerente de misión, tuvo una respuesta a esta especulación de una nave alienígena de gran tamaño similar a un cubo Borg en nuestro sistema solar. “Esto es, por supuesto, una completa tontería”, dijo Fleck a la revista Vice. “El cuadrado negro se debe a un bloque de telemetría faltante (dañado)”. Según quiere hacernos creer, el extraño cubo oscuro de la imagen no es un objeto, y mucho menos una enorme nave extraterrestre. “Es una anomalía de imagen, una falla en sí misma, causada por errores de transmisión entre SOHO y la Tierra”. Vaya que coincidencia que siempre ocurra lo mismo cuando un cubo ha sido detectado, ya que no es la primera vez que ello ocurre. SOHO se encuentra en una órbita de halo a aproximadamente un millón de kilómetros de la Tierra, y a modo de excusa, Fleck dice que las imágenes que nos envía a esa distancia “comprensiblemente pierden algunos píxeles de vez en cuando, los cuales normalmente se tapan cuando la nave espacial reenvía sus datos”. “La mayoría de los bloques que faltan son llenados por nuestro procesamiento, pero esto no siempre funciona, y no todos los bloques que faltan se llenan correctamente”, afirma Fleck. “Los datos científicos finales de nivel 0 no se ven afectados por esto, aseveró” Según explica la NASA, las imágenes SOHO más recientes se comparten públicamente en una galería actualizada con frecuencia. Estas imágenes llegan recién salidas de las ondas de luz desde el espacio, por lo que la NASA advierte que los datos están destinados solo a inspección visual, no a análisis, ya que no son de calidad científica. Los bloques que faltan son comunes en las nuevas imágenes de SOHO, incluida la reciente, que ha provocado la especulación. Es curioso como la NASA se ha tomado tantas molestias en dar una explicación a lo que consideran una nueva 'anomalía'. Normalmente deciden no entrar en la polémica, pero esta vez lo han hecho y han ofrecido todo tipo de argumentos para intentar disipar cualquier teoría conspirativa. Pero el efecto ha sido completamente inverso, ya que ha hecho que un gran número de teóricos de la conspiración aseguraran que de nuevo la NASA miente y vuelve a ocultar la presencia extraterrestre en nuestro planeta. Esta no es la primera vez que la NASA es criticada por los ufólogos. En julio, volvió a crear polémica tras haber cortado una transmisión en vivo desde la Estación Espacial Internacional (EEI) en la que aparece un OVNI entrando en la atmósfera de la Tierra. Por lo visto, la polémica esta servida.
