TIEMPOS DEL MUNDO

sábado, 5 de enero de 2013

SILBERVOGEL: Un avión futurista con el que los nazis planeaban atacar New York desde el espacio

Lo que veis en la foto es una recreación de una nave innovadora alemana que podría haber cambiado el curso de la historia para siempre, pero hubo diversos factores que conspiraron en su contra. En efecto, documentos recién descubiertos publicados este fin de semana en The Daily Express confirman los planes nazis de enviar cohetes tripulados al espacio para atacar desde allí a los Estados Unidos El nombre del proyecto era Amerika Bomber (una iniciativa del Reichsluftfahrtministerium, el Ministerio del Aire Nazi, bajo la dirección del Mariscal Hermann Göring) y el del avión destinado para ello Silbervogel (pájaro de plata), fruto de la mente del genial ingeniero aeroespacial Eugen Sänger. El diseño del bombardero influyó mucho las ideas de cómo debían ser los viajes espaciales en EE.UU. de posguerra, acentúa el historiador David Baker. "Los conceptos de algunas series enteras de naves cósmicas de la más alta categoría se basan en sus teorías. Su trabajo tuvo un gran impacto sobre varios aspectos del programa de los transbordadores espaciales", comenta Baker, según recoge The Daily Express. A finales de 1941 cuando los EE.UU. entraron a la guerra tras el ataque a Pearl Harbor. Hitler estaba obsesionado con la idea de bombardear ese país como castigo por su decisión. Pero para cumplir con el sueño del Führer, Alemania necesitaba una tecnología innovadora. Los seis mil kilómetros que separan Berlín y New York, eran un obstáculo insuperable para los aviones de la Luftwaffe: era imposible que realizaran un viaje de ida y vuelta sin reabastecimiento. Así, Göring encargó a Sänger que encontrara una solución técnica al problema. El proyecto de un caza bombardero continental reutilizable que el científico finalmente propuso tenía 900 páginas. Según Sänger, el Silbervogel debía ser motorizado por un cohete suborbital. Tenía que lanzarse sobre un enorme trineo adjuntado a un monorriel de 3 kilómetros de largo alimentado por 36 motores basados en el cohete V2 (un misil balístico desarrollado en Alemania a principios de la Segunda Guerra Mundial). La nave debía acelerarse hasta unos 1.900 kilómetros por hora y al final del monorriel iniciar el despegue. 30 segundos después del despegue tenía que empezar a funcionar el motor de propulsión de 100 toneladas de peso del propio avión. Ocho minutos después del arranque, el Pájaro de Plata alcanzaría unos 130 kilómetros de altura sobre la Tierra, para seguir una trayectoria suborbital hacia su blanco final. Sänger probó matemáticamente que el vuelo a una altura suborbital ahorraría combustible, prorrogando su período de vida para que fuera suficiente para todo el viaje de ida y vuelta a EE.UU. "El plan era explotar una bomba con arena radiactiva por encima de New York, para que se formara una nube radiactiva que cubriera toda la ciudad", filtra en su libro sobre el tema el historiador David Myhra.Una vez se deshiciera de la carga, el Pájaro de Plata descendería bajo la fuerza de la gravedad, reentraría en la atmósfera y se deslizaría hacia el territorio japonés en el Pacífico. Lamentablemente, Göring consideró que el proyecto era demasiado futurista por lo que fue cancelado, una decisión tomada como consecuencia del ataque de la Unión Soviética a Alemania por lo que tuvo que destinarse todos los recursos necesarios para hacer frente a esa agresión criminal. Sin embargo, los estudios después de la Guerra probaron que la idea de Sänger era teóricamente posible. Así, cuando la tecnología nazi cayó en manos de sus enemigos fue utilizado para desarrollar proyectos similares que dieron origen a la exploración espacial Que distinto sería el mundo si los nazis hubiesen ganado la guerra. A que eran unos genios ¿no os parece?